La diputada Cristina Girardi (PPD) presentó junto a los parlamentarios Félix González (PEV), Tomás Hirsch (PH), Marisela Santibañez y representantes de organizaciones animalistas un proyecto de ley que prohíbe el uso de animales “como elementos disuasivos para restablecer el orden público en las manifestaciones”.
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Para la autora del texto, Cristina Girardi, esta iniciativa “tiene que ver con una demanda ciudadana, por el uso de animales en el restablecimiento del orden público”. Además considera innecesario someter a caballos y perros al contacto con bombas lacrimógenas, zorrillos o situaciones de estrés “con el único propósito de satisfacer las necesidades humanas”, agregó.
Señala también que el objetivo de este proyecto es hacer que el humano no esté por sobre otras especies como un ser superior, sino que pretende evitar el sometimiento de otras especies a un sufrimiento innecesario. Recalca que “no es que no se pueda usar animales de servicio: lazarillos o perros buscadores de personas. Esto no va en contra de eso, sino del mal uso y sometimiento de animales».
El presidente de la Comisión de Medio Ambiente, Félix González señaló que el gobierno “no puede estar usando y abusando de los animales para ejercer violencia hacia los manifestantes que se reúnen en las distintas plazas del país. Nosotros no vamos a aceptar que, aparte de violar los derechos humanos, estén usando los animales para ello”.
Además señala que el proyecto será puesto en tabla el próximo miércoles 11 de marzo en la Comisión de Medio Ambiente de la Cámara de Diputados debido a que el hecho denunciado ocurre actualmente en las manifestaciones que ocupan las calles del país.
El texto presentado desprende que dentro de las facultades que Fuerzas Especiales de Carabineros tiene para la disuasión de los manifestantes “está la utilización de caballos como elementos para restablecer el orden y seguridad pública. Esto ha provocado el descontento de diferentes organizaciones animalistas como Animal Libre, Derecho y Defensa Animal, Sinergia Animal, entre otros, junto con el Colegio Médico Veterinario, quien fue categórico en rechazar el uso de caballo para el restablecimiento del orden público”.
Desde el Colegio Médico Veterinario expresaron su preocupación en torno al uso de gases lacrimógenos debido a que tienen «un grado de reacción importante en los equinos, aunque menor con respecto a los humanos. Al mismo tiempo, muestran que la exposición al fuego y gases son factores estresantes para este grupo de animales, como también, la exposición al ruido dado que su sensibilidad auditiva es mucho mayor en relación con otros animales”.