El miércoles se vivió una nueva jornada de protestas en el centro de Santiago, encabezado por estudiantes secundarios, en el marco del segundo aniversario de Gobierno de Sebastián Piñera y a un par de días de que se cumplan cinco meses desde el estallido social, el pasado 18 de octubre.
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Y a medida que suceden enfrentamientos entre manifestantes y carabineros, las redes sociales ven aparecer videos en los que se acusa a los uniformados de aplicar un uso desmedido de la fuerza para dispersar las protestas.
Entre ellos se viralizó lo ocurrido en el Pase Ahumada, en pleno centro de la capital, en el que peatones y comerciantes ambulantes «expulsaron» a un piquete de Fuerzas Especiales desde el lugar.
Transeuntes y vendedores ambulantes expulsando a pacos del paseo Huerfanos de Stgo pic.twitter.com/Gp8Iz9UZyl
— EL BEAT DEL TAMBOR (@elbeatdeltambor) March 11, 2020
Escupos y botellazos
El video compartido en redes junto a la lectura «Transeúntes y vendedores ambulantes expulsando a pacos del paseo Huérfanos de Santiago» se produjo según testigos luego de la detención de una persona.
Y en medio de cientos de testigos, que registraban con sus celulares lo que sucedía, empezaron a lanzar objetos y escupitajos a los uniformados para hacerlos retroceder.
El registro generó polémica por la forma en la que fueron tratados los carabineros. La discusión se dio porque mientras algunos cuestionaban la falta de respeto hacia los funcionarios, otros aseguraban que esto solo era una respuesta a la forma en la que la institución ha actuado durante estos meses de manifestaciones.
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Yo estuve en el sector y no es la forma de llegar a intervenir por parte de
«Eso repercute en los transeúntes, el cual provoca alteraciones. Todo tiene causa – efecto estimado. De acuerdo contigo en que solo «algunos» son cómplices de delincuentes», decía uno de los comentarios.
«Me queda super claro que estos empleados del desgobierno son unos cobardes… solo atacan a los estudiantes y a los adultos mayores… con un grupo de hombres y mujeres bien plantados se cagan de miedo y arrancan…», se leía en otro comentario.
