El Arzobispado de Santiago informa el fallecimiento del padre Mariano Puga, a los 88 años de edad, haciendo un llamado a mantenerse «unidos en oración por el descanso eterno del querido padre».
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La noticia fue confirmada también por la agrupación La Minga Villa Francia, que confirmó el deceso pasadas las 02:00 horas del sábado, a través de una declaración pública en la que anunciaba con pesar la noticia.
La información generó un hondo dolor el que quedó reflejado en las redes sociales, que se llenaron de mensajes de reconocimiento al trabajo de Puga durante la dictadura en Chile.
Triste despertar, nos dejó el cura obrero, alegre, solidario, defensor de las causas justas, un luchador incansable, hasta siempre Mariano Puga, descansa en Paz… pic.twitter.com/Fwo5bE8KcV
— manuel ballesteros (@pschiloemanuel) March 14, 2020
Adiós querido defensor del pueblo,
Mariano Puga.
Gran ser humano, siempre recordaremos tu valentía y alegría ante el dolor y la desesperanza.
Chile no olvidará tu noble lucha.
"Hasta siempre Curita obrero."
Q.E.PD. ✝️🕊️ pic.twitter.com/iv4aw30BOp— Cristian Antonio. #YoApruebo. (@HarryFT0712) March 14, 2020
https://twitter.com/Fierrojoli/status/1238788750114684929
Un poco de historia
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Mariano Puga Concha fue un sacerdote diocesano chileno. Conocido como “cura obrero”, ex párroco de La Legua, creador de la Parroquia Universitaria y defensor de los Derechos Humanos durante la dictadura militar de Chile.
Nació el 25 de abril de 1931 en el barrio Concha y Toro, en pleno centro de Santiago, donde se crió junto a seis hermanos en el seno de una familia tradicional, republicana y aristocrática, entre cuyos ancestros figuran don Mateo de Toro Zambrano. Su padre, Mariano Puga Vega, fue un ilustre parlamentario y embajador en Estados Unidos. Su madre, Elena Concha Subercaseaux, era hija de Melchor Concha y Toro, por lo que estaba emparentada directamente con los dueños de Viña Concha y Toro.
Realizó sus estudios primarios y parte de los secundarios en Londres, donde se había establecido temporalmente su familia. Al regresar a Chile asistió al Colegio Grange y continuó en la Escuela Militar, para finalmente cursar estudios superiores en la Pontificia Universidad Católica de Chile, donde abandonó la carrera de Arquitectura para seguir su vocación sacerdotal, que surgió cuando un trabajo relacionado con vivienda social lo condujo junto a algunos compañeros al campamento de San Manuel, en la comuna de San Joaquín, donde entró en contacto con la extrema pobreza.
Tras un voluntariado permanente ayudando a los más pobres, optó por abandonar sus estudios universitarios para ingresar al Seminario Pontificio. Fue ordenado sacerdote en 1959 y enviado a París ese mismo año, para estudiar Liturgia. Desde ahí continúa estudios en Italia y Bélgica, obteniendo el grado de Doctor en Teología Moral, lo que le permitiría impartir cátedra teológica en la Universidad Católica de Chile.
También fue director espiritual del Seminario Pontificio Mayor de Santiago, en la década de los 60, cuando el seminario estaba en Apoquindo 7218, Las Condes, donde actualmente hay una sede de INACAP, y formador del mismo instituto formador de sacerdotes hasta 1972
Además, fue uno de los gestores de dejar ese edificio para crear un nuevo estilo de seminario, en el cual los futuros sacerdotes vivían en parroquias o casas en sectores populares, en contacto más directo con las bases del catolicismo, y desde allí viajaban a realizar sus estudios. Esta experiencia duró diez años.
En la década de los 70 llega como nuevo sacerdote a la Villa Francia, en la comuna de Estación Central en Santiago, y trabaja como pioneta de la fábrica de casas Corvi. La cesantía lo llevó a ofrecer servicios como pintor de obra gruesa para capillas, colegios y ferreterías de la capital.
Ya en los 80, y luego de un breve autoexilio a Perú, retornó a Chile para integrarse a la Bolsa de Cesantes con que la Vicaría de la Solidaridad buscó aliviar la crisis laboral y económica que hubo en la época.
En 1987 participó en la visita a Chile del Papa Juan Pablo II.
Por espacio de 12 años (1980-1992) ejerció el ministerio sacerdotal en Pudahuel y luego en la población La Legua, Desde la década de los 90, el padre Mariano Puga se hizo misionero en la Región de Los Lagos, específicamente en la localidad de Colo, isla de Chiloé, donde continuó su labor pastoral. Posteriormente vuelve a establecerse en Villa Francia.
Además, el padre Mariano fue uno de los fundadores y miembro de la Fraternidad Sacerdotal Iesus Charitas, inspirada en el carisma del beato Carlos de Foucauld, de la cual fue su responsable internacional entre 2000 y 2006.
Durante el ejercicio de su ministerio, Mariano Puga predicó numerosos retiros espirituales en diversas partes, tanto a sacerdotes, religiosas y laicos, además de dar clase de Liturgia.
En 2009 es condecorado con el premio «Héroe de la Paz», que anualmente otorga la Universidad Alberto Hurtado. La ceremonia, efectuada en dependencias del Congreso Nacional, fue encabezada por la entonces presidenta de Chile, Michelle Bachelet.
En 2019 abandona Villa Francia y viaja al Encuentro Mundial por la Fraternidad, celebrado en Filipinas. De regreso en Chile, comienza en abril del mismo año el tratamiento contra el cáncer linfático.