Tragedia en Argentina. Este miércoles falleció la 28ª víctima de coronavirus en el vecino país, identificado como Luis Suárez de 76 años y que tras su muerte se esconde una historia plagada de irresponsabilidades en medio de la crisis sanitaria que asfixia al mundo.
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Según da a conocer La Nación, el fallecido era abuelo de Eric Toledo, el joven de 24 años que causó indignación al otro lado de la cordillera al regresar de Estados Unidos y luego rompió la cuarentena obligatoria establecida por las autorldades trasandinas.
Lo peor no fue solo eso. Toledo, quien se encuentra con prisión domiciliaria en la localidad de Moreno tras superar la pandemia en un hospital de Buenos Aires, también había asistido a una fiesta con más de cien personas en La Reja.
La historia comenzó el 13 de marzo cuando el joven de 24 años volvió de Estados Unidos. De inmediato se le ordenó una cuarentena de catorce días que interrumpió dos días después al asistir a una fiesta en la que hubo cerca de cien invitados. Tras ello fue diagnosticado con covid-19.
La imprudencia podría llevar a consecuencias aún más grave: Diez personas que asistieron a la fiesta presentan síntomas. Dos eran adultos mayores, y uno de ellos era su abuelo que falleció este miércoles en el Hospital Mariano y Luciano de la Vega.
Las autoridades denunciaron al joven, al que se le acusa del delito penal contra la salud pública, por lo que arriesgaría una pena que va desde los quince hasta dos años de cárcel. Además interpusieron en su contra una demanda civil por daños y perjuicios contra la comunidad.
