Una mujer de 85 años terminará ante la Justicia en Argentina luego de violar la cuarentena que rige en todo el país para salir a tomar sol.
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La octogenaria llevaba una silla de playa y la desplegó en la zona de los bosques de Palermo ente la mirada de incredulidad de varios policías y de la poca gente que se encontraba en el lugar.
Sara, como fue identificada, llegó poco antes de las 15.00 horas y cuando los uniformados se le acercaron para decirle que tenía que irse a su casa, les respondió que la dejaran un rato y que la esperaran hasta las 15.20, apunta Infobae.
“Colabore usted conmigo que soy una vieja que necesita aire y sol. Sea usted una persona bondadosa. Debería ser una persona bondadosa, no una persona que venga a hincharme y a jorobar porque no estoy contagiando a nadie”, agregó la mujer.
Llegada la hora, tomó la silla y se dirigió hasta su departamento e incluso cruzó una calle a mitad de cuadra por lo que varios automovilistas tuvieron que detener su marcha. Un par uniformados la siguieron y la mujer terminó insultándolos.
Según TN, Sara fue notificada por incumplimiento del artículo 205 del Código Penal e imputada por la Justicia por “violar el aislamiento social, preventivo y obligatorio”.
«No están cuidando nada. Son cuatro estúpidos metidos en un patrullero a los que tengo que pagarles yo con mis impuestos para que hagan estupideces en lugar de estar en Plaza Italia, que es en donde se cometen las aglomeraciones y la gente se contagia», aseguró la mujer al mismo medio.
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Finalmente, dijo que había salido a tomar sol para tener “vitamina D” y desafió a las autoridades afirmando que “lo voy a seguir haciendo cuantas veces se me ocurra».
«Ni me pueden contagiar ni contagio a nadie. Los rayos ultravioletas son especialmente buenos para el coronavirus, para no pescárselo», agregó.
