Claramente pertenecer a la realeza tiene varios beneficios. Y la Reina tiene algunos que otros miembros de la Familia Real no tienen. Por ejemplo, ha viajado durante todo su reinado sin utilizar pasaporte. En casi 70 años, Isabel II nunca ha utilizado un documento como ese. ¿No se lo piden en los otros países? ¿Cómo ha podido viajar? De hecho, la monarca ha estado en más de 100 países y nunca se le ha solicitado el mencionado documento.
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Cabe destacar que es el único miembro de la Familia Real que no utiliza pasaporte. ¿Por qué? Lo explican claramente en la página oficial de la Familia Real. «Cuando viaja al extranjero, la Reina no requiere un pasaporte británico», explican. Detallan que además, la portada de los pasaportes británicos están «en formato de la Unión Europea, de color granate y presenta el escudo Real». Y que en su primera página contiene otra representación del escudo. Ahí habría otro punto clave.
Viajan «en el nombre de Su Majestad»
En esa primera página se puede leer un mensaje que menciona a la Reina. «El Secretario de Estado de Su Majestad Británica solicita y requiere, en nombre de Su Majestad, a todos aquellos a quienes les concierne permitir que el portador pase libremente sin impedimentos ni obstáculos y que le brinde al portador la asistencia y protección que sea necesaria», dice en el documento.
Esto significa que cada pasaporte británico autoriza el viaje «en nombre de Su Majestad». La lógica apunta a que no sería necesario que ella se autorice a sí misma. Pero la monarca tampoco tiene licencia de conducir. Al parecer, el motivo sería similar al del pasaporte. Pero tiene otros privilegios también. Antiguamente, no pagaba impuestos, pero desde 1993 comenzó a hacerlo por temas de imagen.
