El caso de una adolescente de 14 años mantiene en estado de impacto a la localidad de Verkh-Tula, en Rusia. La niña trató de esconder un embarazo a tal punto que no dudó en asesinar brutalmente a su hijo apenas nació.
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Según reportan los medios locales, la joven identificada como Anastasia, ocultó el embarazo a sus padres, profesores y amigos, por los nueve meses de gestación.
La menor no dejó de asistir a clases y se las arregló para no levantar sospechas, hasta que llegó el momento de dar a luz. Su pieza la adolescente parió y apenas nació su hijo, lo tomó, lo colocó en una bolsa de plástico y lo dejó en un congelador que había en el garaje de su casa. El recién nacido falleció en minutos.
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Terrible sorpresa
Eran tanto los gritos de dolor de la niña que sus madre llegó a su pieza y le pensó que era una apendicitis, pero en el trayecto al hospital, la joven contó toda la verdad y sus padre de inmediato avisaron a las autoridades de lo sucedido.
Ahora, según la policía rusa, la adolescente permanecen internada en estado grave producto de las condiciones en que dio a luz.
La policía informó, además, que el padre del niño es un compañero de la menor, de 16 años de edad. Mientras que los padre de la niña aseguraron a las autoridades que ellos nunca supieron del embarazo, solo pensaron que su hija había subido algunos kilos.