Increíble, pero cierto. Era 1952 y una mujer buscaba el vestido de novia perfecto para su matrimonio, pero en la tienda donde ella pretendía probárselo, no la dejaron entrar debido a ser de raza negra.
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Hoy, luego de casi 70 años, Martha Tucker regresó y pudo ponerse aquel vestido de sus sueños.
Su nieta, Angela Strozier, escuchó su historia y la discriminación que había sufrido, y reservó una hora en una tienda para que su abuela pudiera probarse un vestido.
El medio Newsweek, indicó que muchos familiares llegaron de sorpresa a la tienda para ver el hermoso momento y sorprender a Martha.
Angela describió a su abuela como «una persona generosa» y que «quería que entendiera que un sueño aplazado no tenía por qué serle negado (…) Cuando nos confiesa que desea hacer algo, intentamos materializar su deseo».