Se sabe que su fama les ha dado mucho dinero. Podrían manejar vehículos cuyo costo fuera de siete dígitos en billetes verdes; pero en lugar de eso, también conducen autos que podrían considerarse “comunes”, y accequibles en cualquier automotora.
Por ejemplo la actriz Alyssa Milano, famosa desde pequeña, productora y dueña de su propia línea de ropa femenina, conduce un modesto Nissan Leaf, un automóvil eléctrico apto para carretera que es además el más vendido en el mundo.
Otros que están en esta lista son Brad Pitt y Angelina Jolie. En este recuento, destacan por tener para su uso diario una Chevrolet Suburban, todo un “mamimovil” tienen a su servicio, para poder desplazarse a todos lados con su media docena de hijos.
Jennifer Lawrence, quien alcanzó reconocimiento mundial interpretando a la heroína Katniss Everdeen en The Hunger Games, mantiene su sencillez con su Volkswagen Eosm, el sucesor en el primer mundo del Golf Cabrio. Bastante parecido al Ford Bronco que usa el talentoso Benicio Del Toro.
Y bueno, el propio presidente de Estados Unidos pone el ejemplo. Para sus actividades cotidianas maneja una camioneta Ford Escape Hybrid, una que adquirió luego de vender su Chrysler 300C.
