Hace algunos meses publicamos la extraña manera en la que los cubanos podían comprar autos, la cual era por medio de una carta y un millón de trámites, pues bien, ello se terminó gracias a un comunicado emitido por el gobierno del país en el que se declara esta carta como “obsoleta”.
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Desde ahora los cubanos podrán comprar automóviles usados y nuevos, que sólo son vendidos por el gobierno y que tienen un impuesto del 100%, ingresos que iran directo a la creación de un fondo nacional para fomentar el transporte público.
Por muchos años el automóvil era un estímulo que recibían los ciudadanos cubanos por sus méritos con el país, aunque éstos tenían un precio que rozaba el cielo, por lo que se convertían en un bien del cual sólo algunos tenían el privilegio.
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En 1993 se comenzaron a vender también a quienes demostraban que habían ganado dinero legalmente, pero aún así ellos debía contar con la “carta” oficial que era dada por el gobierno.
Con este mecanismo se vendían unos 200 automóviles usados al mes, por lo que las personas en lista de espera para obtener la bendita carta llegaron a las 10.000, lo que se tradujo en que el último de la cola debía esperar cerca de 50 años para poder obtener un auto.
Se espera que con esta nueva ley, los automóviles bajen su precio de modo de que todos los cubanos que así lo deseen, puedan realmente comprar un auto.
Fuente: BBC