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Arabia Saudita es el único país que prohíbe a las mujeres conducir, pero el 30 de noviembre, el príncipe Alwaleed bin Talal usó Twitter para decirle a sus 5,4 millones de seguidores «Detener el debate. Es hora de que las mujeres conduzcan».
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Poco después de este Tweet, la oficina del Príncipe Alwaleed publicó una declaración de cuatro páginas en la que se esbozan las diversas razones por las que se debe permitir a las mujeres conducir en el país.
En la declaración, Alwaleed dice que «evitar que una mujer conduzca un automóvil es hoy una cuestión de derechos similares a la que le prohibió recibir una educación o tener una identidad independiente».
La declaración también expresó la importancia de que las mujeres puedan conducir por razones económicas, de desarrollo y sociales. Dijo que «[las mujeres tienen que] seguir dependiendo de los conductores extranjeros, una alternativa que cobra un costo de los ingresos de la familia, o bien siguen tomando taxis, que también son costosos».
Aljazeera informa que miles de millones de dólares se drenan de la economía saudita debido al uso extensivo de conductores extranjeros.
Aunque el príncipe Alwaleed no tiene ningún cargo político en el país, tiene intereses significativos en muchas corporaciones nacionales e internacionales.
