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Una pena para el mundo de la música es lo que representa el reciente fallecimiento de Geroge Michael, quien tuvo una muerte tranquila en su casa de acuerdo a lo que informó su publicista, algo que dista mucho de su vida de conductor, ya que en múltiples situaciones se vio envuelto en exóticos accidentes de tránsito. Su más recordado episodio ocurrió el 2013 y presentó a un George Michael que se detuvo en la carretera M1, una autopista que de sur a norte que conecta Londres con varios poblados, su problema no fue la detención del automóvil, sino que el cantante abrió la puerta y decidió salir de él cuando circulaba a 120 km/h… luego se excusó diciendo que su puerta estaba mal cerrada y la había abierto sólo para cerrarla bien.
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En 2004 estrelló su BMW convertible en los muros de contención de la carretera A20, en la zona de North Acton en Londres, Inglaterra. Un mes después, chocó con un poste, cerca de su casa, al quedarse dormido al volante.
Para abril de 2006, golpeó tres autos al tratar de estacionarse, encontrándose bajo los efectos de la marihuana (como se determinó posteriormente). Para justificarse aceptó ser el peor conductor del mundo.
En 2007, el gobierno inglés le prohibió manejar por dos años debido al uso de sustancias psicotrópicas al momento de conducir.
No duró mucho su buen comportamiento ya que justo cuando se levantó su castigo, chocó con su Range Rover una van en una de las autopistas más importantes de Inglaterra, accidente que lo tuvo en la cárcel por ocho semanas.
Ya en el 2012, su Range Rover volvió a sufrir las consecuencias de las drogas chocando contra un quiosco de fotografías luego de ingerir marihuana, por ello se ganó una sentencia de ocho semanas en prisión y cinco años sin poder conducir.
En fin, George Michael hoy ya está descansando y agradecemos que tras sus múltiples accidentes su muerte se diera de una forma pacífica y tranquila.
