Una preocupante alza mostró el robo de autos en Chile durante el primer trimestre del año. Según datos de la Asociación de Aseguradores de Chile (AACh), el delito creció un 7,7 por ciento, llegando a 2.293 unidades sustraídas.
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Esto representa un incremento con respecto a febrero, en el que se registraba un acumulado de 5,3 por ciento.
De los más de dos mil robos, 177 corresponden a marcas de alto precio, que poseen unidades cuyo costo supera los 25 millones de pesos, lo que significa un alza anual de un 20,4 por ciento.
También preocupa la tasa de autos hallados, que durante 2017 es de un 54,8%, mucho menor al 81,6% de igual tiempo en 2016.
Asimismo, la violencia se ha convertido en la tónica en este tipo de incidentes. Según la AACh, el 77,8% de los robos ha sido con algún episodio de violencia, donde los llamados «portonazos» mantienen el rango de 2016, con el 22,4%.
La mayor ocurriencia es cuando el auto se detiene a dejar o recoger pasajeros o cuando es detenido mientras circula, lo que es el 23,8% de los casos.
Para la AACh, el bajo número de ejemplares recuperados obedece a que «el 80% de los autos robados son, en el corto plazo, para desarme«, según indica el vicepresidente ejecutivo de la entidad, Jorge Claude.
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Muchos de los delitos apuntan a «la extracción de repuestos específicos y para uso recreacional, un robo para el fin de semana«, según Claude.
Mercedes Benz, BMW y Audi son las tres marcas más robadas en el segmento de autos de lujo, mientras que a nivel global, el Toyota Hilux es el más sustraído, con 296 unidades durante los últimos 12 meses.
