2020 es el año elegido para que Aston Martin se suba a la pelea de los superdeportivos. Eso es lo que la misma casa británica proyecta en su planificación de lanzamientos para los próximos años, en el que incluso hay espacio para el reemplazo del nuevo DB11.
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El jefe de Aston Martin, Andy Palmer, trazó los planes desde 2018 en adelante. “Empezará con nuestros modelos GT, los DB11, Vantage y el Vanquish. En 2019, tendremos el DBX. Después, el competidor del Ferrari 488. Más tarde, el Lagonda”, explicó. El ciclo es de siete años, por lo que se proyecta que el reemplazo del DB11, estaría disponible en 2023 con el rótulo de DB12.
Con este superdeportivo, aún sin nombre, Aston Martin entra de lleno en la pelea con otros autos de este tipo, como el Ferrari 488 y el Lamborghini Huracán.
Si bien el anuncio no deja espacio a más detalles técnicos, se rumorea que el modelo británico tendría el motor centralizado, pensando en el reparto de pesos lo más equitativo posible, y que tendrá como base el Valkyrie (foto), su modelo limitado de 1.000 caballos de potencia y motor V12 de 6.5 litros atmosférico.