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La tercera generación del Suzuki Dzire presenta un nuevo look. Y, sin duda, exhibe su mejor cara hasta ahora. Es que deja de ser un hatchback al que le agregaron una maleta para convertirlo en un auto de tres volúmenes, y la marca diseñó un auto con personalidad propia y que, estéticamente, está bien logrado.
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Con un motor de 1,2 litros, 82 caballos y 113 Nm de par, el nuevo Dzire destaca por un excelente rendimiento, que destaca entre sus competidores directos en el mercado, y ofrece versiones con caja mecánica o automática. Además, ahora está construida sobre la plataforma Heartect de la marca japonesa, que le da hace mayor amplitud, mejor rendimiento y más ligero. Prueba de ello es la ampliación en 73 litros de su maletero, que le permite ahora albergar 378.
Con un diseño distintivo, con nuevo frontal y toques cromados, con líneas que nacen desde el capot para darle fluidez al look, este sedán mejora significativamente también en espacio interior, sobre todo añadiendo espacio para las piernas disponible para los pasajeros de las plazas posteriores.
El equipamiento es otra de las novedades del Dzire. Destaca en las versiones más equipadas un sistema de infoentretenimiento con pantalla táctil, full conectividad con cuatro parlantes y dos tweeters. Además, cuenta con un nuevo panel de instrumentos y volante en forma de “D”, con mando de radio al volante y bluetooth. Incluye puerto de 12 V y aire acondicionado para los asientos traseros.
El nuevo Dzire llega en seis colores y tres versiones de equipamiento, con renovados argumentos para pelear en un segmento muy competitivo, donde espera sacar ventajas. Suzuki pone a la venta la versión de entrada a un precio de 7.590.000 pesos.
