Los fundadores de la empresa sueca Uniti tenían un sueño claro y definido. Ellos se propusieron cambiar para siempre el panorama del transporte en las ciudades basados en un auto futurista y, obvio, 100% eléctrico.
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Lo describen como «un vehículo con el formato perfecto para el transporte urbano». Claro que hasta ahí de novedoso no tiene mucho. Pero el Uniti marcó la diferencia respecto de sus potenciales rivales primero por su diseño basado en lo orgánico.
Pues si se mira con atención, sobre todo con sus “puertas de tijeras“ abiertas, definitivamente parece una polilla o al menos una mariposa extraña.
Y segundo, porque sus creadores decidieron prescindir de cualquier lujo que no sea lo justo y necesario para transportar a dos personas.
Fuera de eso el Uniti suma tecnología de punta como conducción autónoma, Head Up display, realidad aumentada o control gestual.
Lo importante es que la marca, tras su exitosa campaña de financiamiento, fijó la ciudad de Landskrona, cerca de Copenaghe, para empezar a construir el modelo a partir del próximo el 7 de diciembre.
Se sabe que, además de 1.000 financiadores privados, Uniti cuenta con apoyo tecnológico de Siemens y de la empresa de robótica KUKA Robotics.
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