Los vehículos autónomos han estado en la palestra los últimos días y, lamentablemente, no por cosas positivas. Lo bueno es que siempre hay formas de mejorar y una de ellas la propone Nvidia, que saca su experiencia en tecnología para su nueva herramienta en esta área.
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Se llama Drive Constellation y es una plataforma de controlador basada en dos servidores y que permitirá probar los vehículos autónomos con una simulación fotorrealista, creando así un método más seguro y escalable antes de lanzar las máquinas a la ruta.
Uno de estos servidores ejecuta el software Nvidia Drive que simula los sensores del vehículo. El otro es una computadora de inteligencia artificial para autos Nvidia Drive Pegasus, que procesa los datos simulados.
“La producción de automóviles de conducción autónoma requiere de una solución para probar y validar en miles de millones de millas de conducción, para lograr la seguridad y la confiabilidad que necesitan los clientes. Con Drive Constellation, lo hemos logrado al combinar nuestra experiencia en controlador y los centros de datos”, aseguró el vicepresidente y gerente general del departamento automotor de Nvidia, Rob Csongor.
Drive Constellation permite crear variados entornos de prueba y diferentes complicaciones de ruta, como lluvia o nieve, visión limitada de noche e incluso luces cegadoras. La idea es que el vehículo salga listo con su plataforma autónoma sin poner en peligro a nadie en las calles.