Siempre es un tema sumar un camión nuevo a una flota, principalmente por el costo que conlleva. Este aspecto suele ser tomado más seriamente si hablamos de una máquina usada, con un cierto grado de recorrido, lo que obliga a tener cuidado con algunos aspectos de su mantención.
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Por eso es que Salfa, uno de los concesionarios con más experiencia en maquinaria pesada, entrega una serie de recomendaciones para tener en cuenta al momento de adquirir un camión usado.
- Interiores. Según el subgerente de camiones usados de Salfa, Gerardo Rodríguez, hay que tomarse la inspección con calma. “Invierta tiempo para chequear la cabina, los asientos, el tablero y la litera. Su estado es una clara señal del trato que recibió el camión. Un conductor cuidadoso se refleja en cómo mantiene el interior de su camión”, explica el ejecutivo.
- Choques. La estructura general puede entregar información sobre daños o choques que haya recibido el camión. De paso, revise también el chasis, porque, en caso de volcamiento, puede tener daño.
- Otras señales. Hay que considerar otros elementos, el desgaste de los neumáticos; si es disparejo puede haber problemas en la suspensión. También, preste atención a ruidos, vibraciones o pérdidas de aceite en la caja de cambios y diferencial. En tanto, si ve humo en el escape, siente gases en el respiradero del cárter o hay ruidos en el motor, éste puede estar dañado.
- Prueba en ruta. Éste es el gran punto: “Debe ser lo suficientemente prolongada para que el motor, caja y diferenciales tomen la temperatura normal de trabajo. Así se agudizan los ruidos de estos componentes cuando están dañados o con desgaste excesivo”, asegura Rodríguez.
- Papeles al día. Si todo lo técnico está impecable, asegúrelo con los documentos. Así, para asegurar la compra, revise el Certificado de Anotaciones Vigentes (CAV) que emite el Registro Civil, el número de motor y chasis de la máquina y así podrá confirmar que está libre de prenda, prohibiciones o multas.
