Lo bueno viene en frasco chico, dicen. Por eso, para Skoda no es problema presentar como refuerzo una versión motriz que parece más pequeña, pero que no escatima recursos en volverse tan potente como el mejor del barrio.
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Eso le pasa a la marca checa, que presentó una novedosa versión de su hatchback Fabia, equipada con un motor TSI 1.0 de tres cilindros. Esta configuración permite ofrecer potencias de 95 hp y 160 Nm con la transmisión mecánica de cinco velocidades y de 110 hp y asombrosos 200 Nm con la caja mecánica de seis o la automática DSG de siete.
Esta modificación motriz permite mejorar en aspectos como la aceleración, llegando a 10,6 segundos de 0 a 100 km/h, y el consumo de combustible, el que mejora hasta un 6%. Además, el rediseño del motor baja en 10 kilos por su construcción ligera de aluminio.
En el caso del equipamiento, el Fabia le saca lustre a sus cinco estrellas en las pruebas de seguridad del Euro NCAP con seis airbags y un opcional de cortina, frenos ABS con ESP, tracción electrónica para las versiones más altas, bloqueo de diferencial, asistente de arranque en pendiente, sensor de estacionamiento trasero y delantero (este último en las versiones altas) y cámara de retroceso en el tope de línea, con una lavadora de cámara como opcional.
A eso se suman elementos como volante deportivo multifunción en cuero, calefactor de asientos delanteros, pantalla touch de 8” con App Connect en su tope de línea, sistema Start & Stop, maletero de 330 litros expandible a 1.150 con asientos traseros abatibles, faros LED diurnos, detector de punto ciego, alerta de tráfico cruzado y Climatronic con regulación de polvo en suspensión, disponible en las variantes más altas.
El nuevo Fabia 1.0 de Skoda está disponible en tres versiones: el Active con caja mecánica de cinco a $9.990.000, el Ambiente con transmisión mecánica de seis a $11.290.000, y el Style con caja automática DSG a $12.590.000.
