Ford Mobility está aplicando en Europa un análisis de datos que combina el registro de las rutas de sus vehículos. Esto con el fin de descubrir dónde y por qué se generan más accidentes en algunas calles por sobre otras.
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Durante dos años, el Big Data de los autos con asistencia de Ford ha sido estudiada para analizar cómo estos vehículos pueden hacer más fácil el tránsito por la ciudad. Obteniendo la conclusión de que con algunas mejoras simples, los accidentes por problemas en las calles podrían evitarse casi por completo.
De esta forma, la división de la marca del óvalo le dio un renovado uso a los datos recopilados: “llevamos un paso más allá la seguridad vial predictiva conectándola con expertos en ingeniería civil para entender mejor las razones que provocan los accidentes de tráfico en estos puntos y para hacer sugerencias sobre cómo abordarlas”, dijeron en la compañía.
En colaboración con Traffic Watch UK, los autos conectados de Ford ayudaron a identificar qué comportamientos y agentes externos propiciaban los accidentes en zonas marcadas como de alto peligro.
Así, se descubrieron situaciones como que los conductores y los ciclistas se saltan las señales de tráfico, algunas señales son ilegibles debido a la falta de poda de la vegetación o a la mala orientación de las mismas, las malas condiciones del asfaltado de las calles, incluyendo problemas con el alcantarillado, y los carriles estrechos en la carretera.
Todo esto ha servido para que Ford Europa proponga mejoras como la instalación de cámaras en semáforos comúnmente saltados o la poda u ordenación de mejor forma la vegetación de ciertas calles que compliquen la visual, aportando así al desarrollo de obras viales en grandes ciudades por la propia experiencia y datos de los autos.
Después de su debut en Londres, Ford ya trabaja en otras ciudades con el programa, aplicándose en Valencia en España y también en la ciudad alemana de Colonia.
