Son por lejos el símbolo máximo de la potencia, el rugido de motores y hasta de brutalidad en forma de cabaallos de fuerza si sde quiere, pero el futuro inmediato de Lamborghini está marcado por un perfil definitivamente ecológico.
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Es que parecía broma cuando en un reciente evento europeo denominado Christmas Drive, la marca italiana develó sus planes en materia de ecología. Pero los responsables del ícono entre los autos súper veloces de lujo aseguraron de lo más serios que “el compromiso de Lamborghini es contar con una gama híbrida en esta década de los 2020 y totalmente electrificada en 2030”.
Y como todo en la vida, acá también hubo un primer paso: el Lamborghini Sián que la casa de Sant’Agata presentó en el último Salón Internacional de Ginebra. Se trata de un modelo que funciona con lo último de la tecnología híbrida desarrollada por los responsables del ícono entre los autos súper veloces de lujo.
El resultado final es este Sián motorizado con un V12 de 6.5 litros que se acopla a otro eléctrico con una red de 48V que alimenta todos los sistemas electrónicos del vehículo, por lo que el vehículo puede moverse en modo cero emisiones, además de ocupar un supercondensador en vez de batería de iones de litio, lo que le permite almacenar la energía de las frenadas.
Y siempre en el camino de la sostenibilidad verde, Lamborghini cuenta con un Bio Parque ubicado a escasos metros de su sede y donde han plantado más de 10.000 árboles de especies diferentes desde 2010 hasta hoy de acuerdo con las directrices de la universidades de Bolonia, Bolzano y Múnich.
Todo porque esta zona “incluye una central para el seguimiento y análisis de la calidad del aire así como la influencia de este entorno natural en la zona. Además, una central de de biometano ubicada en este mismo emplazamiento se encarga de producir gas para toda una planta que cuenta también con sistemas que recogen el agua de la lluvia, la filtran y la emplean para la pintura de los coches y que se estima, reduce nada menos que 1.600 toneladas de CO2 al año en comparación con una fábrica de coches convencional”, según el sitio especializado Car and Driver.