Son varias las razones para que tengamos un manejo más prudente cuando salimos de vacaciones o enfrentamos largos trayectos. El alza sostenida de la bencina en el último tiempo y el cuidado del medioambiente por las altas emisiones contaminantes son dos argumentos suficientes para cambiar nuestra forma de conducción.
Para eso, desde Goodyear entregan siete consejos para lograr una conducción más amigable, que ayude a contaminar menos y a gastar menos combustible. No son difíciles y hay que asumirlas para crear los hábitos necesarios.
- Revisar la presión y el estado de los neumáticos: se sugiere revisar periódicamente estos elementos, ya que un neumático en buenas condiciones y correctamente inflados contribuyen a reducir considerablemente el consumo y las emisiones.
- Conducir progresivamente: hacerlo de manera responsable, suave, evitando las aceleraciones bruscas y sin sobreexigir el motor de tu vehículo, puede ayudar a reducir las emisiones de dióxido de carbono en hasta un 50 por ciento.
- Usar correctamente los cambios: si la conducción lo permite, procura utilizar marchas largas, ya que éstas consumen menos combustible y emiten menos gases.
- Anticiparse al tránsito: se recomienda mirar a lo lejos y estar atento a las condiciones del camino, ya que permite anticiparnos a los acontecimientos y mantener una conducción suave para reducir el consumo de combustible.
- Apagar el motor: si la congestión es alta y eso te obliga a estar detenido por más de un par de minutos, es mejor parar el motor. Así, se estima que el ahorro de combustible puede ser de hasta un 10 por ciento.
- Mantener una velocidad uniforme: esto sucede especialmente en carreteras o autopistas y, si el estado del tránsito lo permite, procura evitar las aceleraciones y frenadas bruscas, ya que incrementan de manera considerable el consumo de combustible.
- Usar responsablemente el aire acondicionado: el dispositivo aumenta el gasto de combustible, por lo que se recomienda no abusar del mismo. En ciudad se aconseja ir con las ventanas bajas y el aire acondicionado apagado; en carretera, debe ser al revés, con las ventanas arriba y el aire encendido. Así se logra una menor resistencia al viento.