Volvo Cars se propuso reducir las emisiones de la red logística que usa y por este motivo decidió cambiar la forma de traslado de sus productos a los diferentes mercados, aunque seguirá por vía terrestre.
PUBLICIDAD
Desde ahora, la compañía reemplazó el uso de camiones por el sistema ferroviario, el que en Europa es particularmente masivo. En pruebas de la firma, las emisiones de dióxido de carbono bajaron un 75% entre su planta de fabricación de Bélgica e Italia usando el tren.
El cambio será hecho para el traslado de los productos de Volvo Cars desde sus fábricas hasta depósitos de distribución y concesionarios en mercados individuales.
La idea forma parte del plan de acción climático que la marca reveló este año y que apunta a reducir su huella de carbono del ciclo de vida por automóvil en un 40% entre 2018 y 2025, lo que requerirá una reducción del 25% en las emisiones operativas, incluida la logística.
“Cuando dijimos que planeábamos reducir significativamente las emisiones en todas nuestras operaciones, lo decimos en serio. Este es un ejemplo de nuestro compromiso de reducir nuestro impacto en el medio ambiente a través de pasos significativos y concretos”, declaró el vicepresidente senior de fabricación y logística de Volvo Cars, Javier Varela.
El plan de acción climática de la empresa representa uno de los planes más ambiciosos en la industria automotriz y contiene acciones concretas en línea con el acuerdo climático global de París de 2015.