Cada año, más de 1,3 millones de personas mueren en las carreteras de todo el mundo. Son alrededor de 3.700 vidas que se pierden diariamente. Y las lesiones en carretera son la octava causa de muerte a nivel mundial.
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En este contexto, un consorcio liderado Ford está desarrollando una innovadora herramienta de seguridad vial basada en datos, que analizará la información de vehículos conectados, sensores inteligentes de carretera y datos de las autoridades locales para predecir los posibles puntos conflictivos. Los conocimientos adquiridos permitirán a las ciudades adoptar medidas preventivas para hacer frente a las carreteras y cruces que plantean los mayores riesgos para los usuarios.
«Pronto, cada nuevo vehículo será uno conectado, y vemos esto como una oportunidad para reducir los accidentes y salvar vidas de manera significativa», asegura Jon Scott, jefe de proyecto de City Insights, Ford Mobility Europa. «Al colaborar con los principales innovadores, expertos y académicos – y con el respaldo de Innovate U.K.- estamos convencidos de que podemos ayudar a mejorar la movilidad de millones de personas en todo el mundo».
Movilidad Ford está trabajando junto con partners que incluyen el Consejo del Condado de Oxfordshire, los especialistas en sensores de AI Vivacity Labs, y los principales académicos del Centro de Investigación de Seguridad en el Transporte de la Universidad de Loughborough, con el apoyo de Transport for London. El objetivo es convertir la herramienta en una solución que pueda beneficiar a las ciudades y a los usuarios de las carreteras de todo el mundo. La iniciativa ha recibido el apoyo financiero de Innovate UK, el fondo de innovación respaldado por el gobierno británico.
Ford llevó a cabo una extensa investigación sobre las posibilidades de los vehículos conectados y el análisis predictivo para mejorar la seguridad vial. Hasta 700 vehículos se conectarán voluntariamente en Oxfordshire y Londres como parte de un proyecto de 18 meses de duración.
Los datos telemáticos detallados de la flota de vehículos – como el uso del pedal del freno o del acelerador y el ángulo del volante – se analizarán junto con la información de hasta 25 sensores inteligentes adicionales que serán proporcionados en Oxfordshire por Vivacity Labs, especialista en la captura y clasificación del tráfico, lo que elevará el número total en uso a 100.
Los sensores de carretera de Vivacity emplean algoritmos de aprendizaje automático para detectar incidentes de proximidad y son capaces de analizar los patrones de movimiento de usuarios vulnerables de la carretera como ciclistas y peatones, así como de vehículos no conectados. Todos los datos compartidos por los sensores son anonimizados y las imágenes de video se descartan en la fuente, lo que permite que las carreteras sean más seguras sin invadir la privacidad.
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Los expertos del Centro de Investigación sobre Seguridad del Transporte de la Universidad de Loughborough junto al equipo de análisis y comprensión de datos mundiales de Ford analizarán los datos de los conductores y los vehículos; mientras que el Consejo del Condado de Oxfordshire se centrará en la forma en que las fuentes de datos proporcionadas por las autoridades locales, combinadas con la herramienta de predicción, pueden mejorar la seguridad vial para todos los usuarios.
Los datos y el análisis se utilizarán para seguir probando y desarrollando el algoritmo y una herramienta digital de seguridad vial que sea un producto comercial escalable que beneficie a las ciudades de todo el planeta. El consorcio también tratará de encontrar otras aplicaciones del mundo real para la predicción de la seguridad vial.
El proyecto se lleva a cabo tras dos pruebas exitosas realizadas en Londres en las que analistas y científicos de datos de Ford Mobility tomaron muestras de más de 1 millón y medio de kilómetros de conducción de vehículos conectados para identificar, analizar y proporcionar una orientación detallada sobre la mejora de la seguridad a las autoridades locales en varios puntos conflictivos de seguridad vial en el Gran Londres.
Entre las recomendaciones de mejoras se incluían la implantación de cámaras de luz roja para disuadir los saltos de señales, la reducción de la vegetación para garantizar que la señalización vial fuera claramente visible, la señalización y las señales de doble altura o la repavimentación de las calzadas.
Ford Mobility también está trabajando con las autoridades de Valencia (España) y Colonia (Alemania), para identificar otras formas en las que el análisis de la información relacionada con los vehículos y las infraestructuras puede beneficiar a la movilidad urbana.