Después de una década de descubrirse los restos modificados de una criatura de unos 15 centímetros de largo, científicos han dado con un resultado. El organismo contiene ADN humano, por lo que podría tratarse de una especie de mono más evolucionara y no un “mini alien”, como se le llamó al ser hallado en Chile. En el documental Sirius, lanzado esta semana, se revela la investigación sobre los restos momificados de apariencia extraterrestre que contienen genotipo humano. “Puedo decir con absoluta certeza que no es un mono. Es humano, más cercano a los humanos que a los chimpancés. Vivió hasta la edad de seis u ocho, respiraba, comía y metabolizaba. La pregunta es qué tan grande era cuando nació”, explicó Garry Nolan, director de biología de células madre en la Escuela de Medicina de la Universidad estadounidense de Stanford, sobre el Humanoide de Atacama, apodado como Ata. ¿El público estará decepcionado o aliviado de que Ata haya sido clasificado como un ser humano? Revisa el tráiler de Sirius:
