El amor y todos los sentimientos que se derivan del mismo, tienen una base científica, la cual argumenta que esas intensas emociones podrían afectar su mente y su cuerpo.
Estos son algunos de los efectos del amor.
Atonta a la gente. Según estudios, las personas enamoradas tienen más dificultades para concentrarse y realizar tareas específicas. “Cuando estás empezando una relación, probablemente te des cuenta de que te resulta más difícil concentrarte en otras cosas, ya que empleas gran parte de tus recursos cognitivos en pensar en tu pareja”, afirma el profesor Henk Van Steenberg.
Lo vuelve dependiente. Según Lucy Brown, profesora de neurología y neurociencia de la Escuela de Medicina Albert Einstein de Nueva York, cuando se está enamorado se activa la misma red neuronal asociada a la adicción a las drogas como la cocaína. Esto, según Brown, puede generar euforia.
Lo hace menos sensible al dolor. Se afirma que el sentimiento de amor intenso y desmedido, puede llegar a calmar algún tipo de dolor y reducir molestias físicas. “Resulta que algunas de las áreas del cerebro que se activan por un sentimiento de amor intenso son las mismas zonas que los medicamentos utilizan para reducir el dolor”, asegura Arthur Aron, profesor de psicología de Nueva York.
Lo hace caminar más lento. Investigaciones demuestran que los hombres adaptan su ritmo al caminar para ajustarlo a la velocidad de su pareja y complacerla.
Cambia el ritmo de sus latidos. Al igual que el punto anterior, se ha dicho que cuando la gente está enamorada, los latidos de su corazón van a la misma velocidad que los de su amor.
Hace su voz más aguda. Estudios arrojan que cuando las mujeres están enamoradas, cambian su voz y la vuelven más aguda al hablarle a su amado, asimismo, se dice que los enamorados en general, imitan el todo de voz de su pareja.
El amor ciega. Más conocido como sesgo de atención inconsciente, los enamorados apartan su mirada de otras personas atractivas del sexo opuesto, prestando toda su atención únicamente en su pareja.
Lo convierte en un temerario. Según distintos estudios, las personas enamoradas, sobre todo los hombres, están más dispuestos a correr grandes riesgos por sus parejas, sin importar las consecuencias.
Dilata sus pupilas. Recientes investigaciones afirman que la dilatación de las pupilas está relacionada con intensos estados emocionales. Al parecer el estar enamorado genera tal sensación en el cuerpo que las pupilas se dilatan más fácilmente.
