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Muchas personas recurren a sustitutos para no consumir azúcar real y así evitar el contenido calórico que ésta tiene. Sin embargo, hay muchos mitos negativos sobre estos edulcorantes, procesados con aspartame, stevia, acesulfame-K y sucralosa. Según la enciclopedia médica MedlinePlus, los endulzantes artificiales son sustancias que sustituyen al azúcar o a los alcoholes del azúcar.
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Aquí cinco mitos sobre los edulcorantes artificiales:
1. Causan problemas de salud. Según Infobae.com, los edulcorantes llevan más de 70 años en el mercado y han sido sometidos a múltiples estudios científicos. Ninguno ha comprobado que consumirlos genere algún problema de salud.
2. No se pueden consumir durante el embarazo. Los sustitutos del azúcar no causan problemas en la salud del bebé, tales como malformaciones, de acuerdo con ActitudFem. El portal destaca que algunos médicos los prohiben a las embarazadas para que reciban el aporte energético que brinda el azúcar de caña.
3. No son regulados por entidades gubernamentales. Los endulzantes artificiales pasan por un proceso de pruebas científicas y de organizaciones gubernamentales antes de salir al mercado.
4. Ayudan a perder peso. Según Esmas.com, ningún edulcorante tiene la capacidad de hacer que una persona baje de peso. Lo que sí es cierto es que no tienen calorías, por lo que son útiles para reducir el consumo de éstas.
5. No son para todos. Según estudios, mujeres embarazadas y niños pueden consumirlos. Incluso, las personas diabéticas los utilizan como una alternativa para endulzar sus alimentos.