Un estudio realizado en Suecia por el Instituto Karolinista reveló que los músculos tonificados evitan el paso de quinurenina, una sustancia que provoca el estrés.
Según la investigación -realizada en ratones-, la quinurenina se filtra entre los músculos, llegando al cerebro y produciendo ansiedad. Sin embargo, los tejidos ejercitados evitan el paso de tal sustancia, haciéndonos sentir libres de estrés e inclusive disminuyendo la depresión (si es que se padece).
Jorge Ruas, uno de los investigadores del estudio, mencionó que “un músculo bien entrenado produce una enzima (llamada KATs) que purga el cuerpo de sustancias nocivas”.
En la galería de fotos: Así funciona el proceso.
