Una reciente investigación dio a conocer que respirar aire tóxico en el ambiente durante los dos primeros años de vida, está vinculado al transtorno de autismo.
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El estudio realizado en la ciudad de Pittsburgh, Estados Unidos, informó que el aumento de los niveles de cromo y estireno en el ambiente contribuyen al padecimiento del transtorno autista.
Los niños más afectados fueron los expuestos a altos niveles de aire contaminado durante el embarazo de sus madres y los dos primeros años de vida. Los hallazgos también encontraron que esto afecta a uno de cada 68 niños de Pittsburgh.
“El resultado podría ayudar a explicar el aumento de estos casos“, mencionó Evelyn Talbott, autora principal de la investigación.
Talbott expuso que tanto los factores genéticos como los ambientales, son parcialmente responsables de este transtorno.
En la galería de fotos podrán conocer más datos de la investigación.
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