Existe un gran número de personas que, ya sea porque trabajan medio tiempo, son freelance o porque son emprendedores y manejan sus propios negocios, trabajan desde sus casas. Pese a que trabajar desde el hogar con todas las comodidades tiene su lado positivo, desarrollarse laboralmente desde ahí también puede ser un desafío.
Para ayudarte a superar esta aventura, te presentamos a continuación una serie de consejos para trabajar desde tu casa de la mejor manera:
1. Arma un espacio exclusivo para tu trabajo
Aunque estés tentado a hacerlo, los especialistas recomiendan que no uses tu pieza y sobre todo tu cama como área de trabajo. Esto, debido a que tu cerebro lo asocia a otro tipo de comportamientos relacionados con el descanso y el ocio.
Armar tu propio espacio te permitirá dirigir tu atención y foco hacia las tareas que tengas que completar y te hará ser más riguroso con tus obligaciones.
2. Construye un calendario de trabajo
Sin importar si trabajas medio tiempo para un empleador o si trabajas de manera particular desde tu casa, es importante que te pongas metas diarias y a largo plazo.
Al igual que un ambiente de oficina que cumple con objetivos y tiene reuniones que permiten a los trabajadores determinar cuál es su tarea y rol dentro de la empresa, un calendario con fechas y tareas será la clave para automotivarte a lograr nuevos desafíos en tu área.
3. Aumenta tus habilidades tecnológicas
Hoy en día existen muchas herramientas que apuntan a facilitar la vida laboral y personal de las personas. Mantenerte actualizado será elemental para poder desarrollarte dentro de tu propio espacio laboral.
Debido a que no cuentas con un equipo de informática como es el caso en muchas empresas, te recomendamos que actualices tus habilidades ya sea a través de aplicaciones (por Apple puedes acceder a Genius Bar) o tomes cursos básicos de herramientas como Excel o de programación.
4. Separa a tu familia del trabajo
Una de las cosas más difíciles que se puede hacer cuando trabajas desde tu casa es mantener los límites con las personas con las que compartes tu “hogar”. Pareciera ser que es mucho más fácil para ellos entender que estás ocupado desde una oficina que desde la otra pieza de tu casa.
Separa los tiempos con tu familia desde el minuto en que empiezas a trabajar hasta que terminas. Al principio será difícil (todas las rutinas y hábitos toman alrededor de 60 días en internalizarse) pero será beneficioso para ti, ya que podrás disponer de horas determinadas para el trabajo y tiempo para estar con tu familia o amigos sin pensar en tus obligaciones laborales.
5. Establece tiempos de contacto
Ya sea que trabajes para un empleador o estés en contacto con clientes, es importante que mantengas abiertas tus líneas de contacto, sin embargo junto con esto te recomendamos que, al igual que con tu familia, mantengas espacios para relacionarte en un espacio de trabajo.
De esta forma no solo podrás dividir tu vida personal y laboral de manera efectiva, sino que también le darás a tu empleador y a tus usuarios claridad con respecto a cuál es tu horario de trabajo, sin perder la confianza de las personas que te rodean.