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Cuáles son los 5 beneficios de solicitar un crédito de consumo

Un crédito de consumo es ideal para que ocupes el dinero en los gastos personales que tú quieras, de forma flexible. Conoce bien sus ventajas.

Crédito de consumo
Crédito de consumo

El crédito de consumo es uno de los productos financieros que merece ser conocido, gracias a sus características y beneficios convenientes.

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En este artículo, te explicaremos por qué es una excelente opción si necesitas dinero, ya que este tipo de préstamo está diseñado para ayudarte a cubrir una amplia variedad de gastos personales, lo que lo convierte en una alternativa tan atractiva.

Los beneficios que brinda el crédito de consumo

Empecemos definiendo qué es un crédito de consumo.

Se trata de un préstamo que las personas solicitan a una institución financiera para financiar sus necesidades personales, como comprar electrodomésticos, realizar un viaje o cubrir gastos imprevistos.

A diferencia de otros tipos de crédito, no está destinado a la adquisición de bienes inmuebles o a la inversión en un negocio, sino que se enfoca en facilitar la compra de productos y servicios de uso cotidiano.

1. Es de fácil solicitud y obtención

Los requisitos básicos son sencillos y razonables.

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Generalmente, incluyen tener un buen historial de pago, no estar en mora, demostrar ingresos suficientes para cubrir el préstamo, contar con referencias positivas en el Informe de Deudas del sistema financiero, y cumplir con las políticas específicas de la institución donde se solicite.

Además, muchas entidades permiten realizar la solicitud de manera simple, incluso a través de internet, en cualquier momento.

2. Presenta una gran flexibilidad

A diferencia de créditos como el hipotecario o el automotriz, el crédito de consumo no está limitado a un propósito específico.

Lo anterior significa que, al solicitarlo, tienes la libertad de utilizarlo como prefieras, ya sea para remodelar tu hogar, comprar nuevos muebles, o cubrir imprevistos.

Se te otorga una cantidad global que luego devuelves en cuotas mensuales acordadas, lo que te brinda flexibilidad y control sobre cómo gestionar los fondos.

3. Los plazos son cómodos

Dependiendo del monto solicitado y la capacidad de pago del solicitante, los plazos del crédito pueden variar y ser cortos o medianos, es decir, de 1 a 4 años.

Esto ofrece un margen flexible para devolver el dinero. Como resultado, las cuotas se pueden adaptar a tu situación financiera, haciendo que el pago mensual sea manejable y facilitando una planificación financiera más sencilla

4. Ofrece seguros opcionales

Al contratarlo, hay entidades financieras que ofrecen seguros extra que el solicitante tiene la libertad de contratar o rechazar, como el de hospitalización, cesantía, invalidez y desgravamen.

Dichos seguros son de utilidad en incidencias considerables, como accidentes, pérdida de fuerza o capacidades intelectuales, despido o fallecimiento, para que la deuda no se convierta en un problema.

5. Opción para diferir pagos

Otro beneficio importante son las modalidades para diferir los pagos. La primera opción, conocida como “meses de gracia”, te permite comenzar a pagar en una fecha posterior a tu primer vencimiento (hasta 90 días, por ejemplo). La segunda opción, “meses de no pago”, te permite solicitar periodos en los que no tendrás que abonar la cuota correspondiente.

Estas modalidades están disponibles a discreción de la entidad que otorga el crédito, por lo que es importante estar atento a cualquier ajuste o cargo adicional que pueda aplicarse.

Ahora que conoces las ventajas del crédito de consumo, tienes a tu disposición una opción de financiamiento flexible y adaptada a tus necesidades.

Con esta alternativa, puedes utilizar el dinero de la manera que prefieras y gestionar los pagos de manera cómoda y ajustada a tu situación financiera. No dudes en explorar este tipo de crédito, que puede ofrecerte una solución conveniente y accesible para tus proyectos y gastos personales.

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