Luciano Aued podría estar viviendo sus últimos días como jugador de Universidad Católica. Termina contrato y no está claro si será renovado, en medio de la pelea por un tetracampeonato largo que sería inédito en el fútbol chileno.
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De todas maneras, “Luli” ya está en la historia de la UC con el “tri”, del cual ha sido uno de los grandes bastiones. Pese a ello, no se considera un ídolo.
¿Te sientes un ídolo para el hincha de la UC?
—¿Un ídolo? Nooo, para nada, lejísimos de eso, lo digo con toda modestia. Para entrar en ese mote hay que hacer muchísimo, representar mucho para el club. Sí me siento un jugador muy respetado y querido por los hinchas, y eso me llena el alma, me alegra el corazón, porque es para lo que vine. Me quedo con la primera conferencia, hace más de cuatro años, donde dije que no quería pasar de largo en el club, sino dejar una huella, y creo que lo hemos logrado.
Te lo pregunto porque tu etapa coincide con la mejor del club, con tres títulos seguidos en torneos largos y contigo siendo figura...
—Sí, pero como te digo, no es que sea falsa modestia, sino que yo desde muy chiquito viví el fútbol así y entiendo que para ser ídolo tienes que representar mucho para el club. Sí creo que la gente me valora, que se identifica en muchos sentidos con lo que uno transmite adentro de la cancha y también afuera, defendiendo a la institución, pero me parece que lo de ídolo es para otro rango. Sí es verdad que llevo cuatro años y medio, y nos ha tocado ganar tres campeonatos, tres supercopas, pasar de fase después de 10 años en la Libertadores y llegar a cuartos luego de ocho en la Sudamericana, y ser el equipo que mayor cantidad de tiempo ha estado en la primera posición. Son un montón de cosas donde uno ayudó para que sucedieran, por eso el hincha me demuestra tanto cariño. Y todavía queda este torneo.
Tienes 34 años, ¿te gustaría retirarte en la Católica?
—Sí, son 34 años, pero físicamente me siento muy bien, más allá de que después de esta lesión de cuatro meses, cuesta un poco. Pero siempre confío mucho en mí y en lo que puedo aportar. No sé qué va a pasar en mi carrera más adelante, lo que sí sé es que me siento muy cómodo acá, valorado por los hinchas, y eso me reconforta y me llena.
