Desde la partida de Martín Rodríguez de Colo Colo, Gustavo Quinteros ha clamado por un reemplazante.
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En otro sector de Santiago, en La Reina, donde Melipilla tiene sus cuarteles, parecen tener la solución a los problemas del técnico albo. Cristián Zavala fue, probablemente, la gran revelación del torneo. Gracias a sus desbordes por la izquierda, ayudó a la buena campaña del “Potro”, asistió al goleador del torneo, Gonzalo Sosa, e hizo olvidar la partida a mitad de temporada de Gustavo Guerreño. Tan bueno fue su desempeño que terminó convocado a la Selección.
Por eso, se da por descontado el arribo del puentealtino de vuelta al Monumental, donde se formó. Volvería con un contrato por tres años.
¿Qué sabor le deja la temporada, donde fue protagonista de la campaña de Melipilla?
—Un buen sabor, con gusto a victoria, a nutrirme bien de todos mis compañeros, a saber de que de todos podía aprender algo, de que podía instruirme tomando algo de todos, desde el más joven de mis compañeros al más experimentado. Siempre escuché a todos. Me quedo con eso: recibí los consejos y fui una esponja, donde absorbí todo, porque todo me sirve. Y así será en cada club que vaya…
Respecto de la Selección, ¿siente que fue el premio al rendimiento mostrado en la temporada? ¿La gira le deja lecciones, en términos del aprendizaje?
—Fue un premio al rendimiento que tuve, con cinco goles y nueve asistencias, que son cifras que cualquier jugador sueña. Aunque no me conformo con eso y quiero ir por muchísimo más. Uno de mis objetivos, a principios de año, era ir a la Selección, y se me dio en el último momento… Es algo hermoso. Me dejó lecciones, claro. Estando con jugadores más experimentados, de diferentes ligas, son distintas cosas las que se ven compartiendo con ellos y me sirvió demasiado.
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El interés de Colo Colo es sabido y el fichaje está muy cerca. Habiendo hecho las inferiores allá, ¿le gusta el desafío de volver? ¿Puede ser una revancha?
—Hice las inferiores en Colo Colo y tengo la “espinita” clavada de que salí de mala forma. Obviamente, sería una revancha y daré todo de mí, como lo he hecho en cada club en que he estado. Si se da, me daré por completo para ganarme el respeto del hincha y ver a mi familia bien, porque cuando estoy bien, para ellos es todo más fácil y para mí también todo es mejor cuando los veo bien.
¿Sientes que estás preparado para la exigencia que implica Colo Colo?
—Estoy preparado para estar en Colo Colo o cualquier club grande, de Chile o del extranjero. Pocos jugadores tienen lo que he tenido de experiencia, con pasos por Segunda División, Primera B y Primera, descender y ascender, ir a la semifinal de una Copa Sudamericana que, aunque no haya jugado, la experiencia la tengo igual. Hace un año estaba jugando en Segunda División y acabo de jugar por la Selección. El fútbol da mucha vueltas y por eso me siento plenamente capacitado para jugar por cualquier equipo grande.
¿Pudo hablar ya con Gustavo Quinteros, para saber qué espera, dónde lo va a utilizar? Hace rato que busca un puntero izquierdo para reemplazar a Martín Rodríguez...
—Mi representante es quien ve el tema (del fichaje). Hasta que no esté cerrado (el acuerdo con Colo Colo), no creo que pueda hablar con algún técnico. Y si me toca ir, no voy a ir a la sombra de alguien que ya estuvo, sino a imponer mi propio juego e ir en alza, como siempre.
Considerando su edad, ir a un club grande en este momento, ¿es buena idea? Tal vez saltar de Melipilla a un equipo intermedio y tener continuidad sería mejor…
—No me gustan los esquemas predeterminados con movimientos fijos. La vida se encarga de que las cosas pasen como deben y si se presenta la opción de ir a un club grande, es por algo, por la temporada que hice. De que voy a ir a un club grande, voy a ir. No le veo nada de malo, me esforzaré al 100% para jugar, hacerme un puesto y que mi carrera siga en alza. Lo que más quiero es seguir en la Selección e ir a un club grande ayuda a conseguirlo, así que a eso apunto…