Mohamed Salah y la selección de Egipto se quedaron sin Mundial de Qatar 2022 tras una trágica e indignante definición a penales contra Senegal en el partido de vuelta del repechaje por la clasificación a la cita internacional.
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Tras perder en la ida por la mínima, el conjunto senegalés igualó el marcador global con un temprano autogol del egipcio Hamdi Fathi a los 4 minutos del primer tiempo. Empate que los jugadores no pudieron romper en el tiempo reglamentario ni en la prórroga.
Es así que el cupo mundialista se decidiría a través de los 12 pasos y con una no menor desventaja para “los del Nilo”, ya que se encontraban jugando de visita ante un repleto estadio Estadio Abdoulaye Wade de Diamniadio, Senegal.
Y a pesar de que la tanda de penaltis comenzó con una fallida ejecución del seleccionado senegalés Kalidou Koulibaly, la localía se hizo notar con una molesta técnica para sabotear los penales egipcios.
Múltiples hinchas ubicados detrás de la portería elegida para la definición apuntaron con potentes láseres verdes a las caras de los jugadores de Egipto, provocando que Mohamed Salah fallara su tiro, enviando la pelota a la tribuna.
Minutos más tarde y tras otro penal errado de los visitantes, sería su compañero del Liverpool, Sadio Mané, quien convertiría el 3-1 final para Senegal y sellaría su clasificación al Mundial de Qatar, dejando sin cupo a los faraones.