Jorge Garcés, quien ayer lunes puso fin a su ciclo como director técnico de Santiago Wanderers tras una profunda crisis deportiva y una quebrada relación con la hinchada, dio este martes una conferencia de prensa para referirse a su adiós del club porteño.
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“Como dijo por ahí un técnico colega hace muchos años: muerto el perro, ojalá que termine la rabia. Aunque no es fácil hoy día en la sociedad que vivimos”, declaró el “Peineta”, haciendo tributo a la histórica frase que lanzó el español Xabier Azkargorta cuando puso fin a su pobre etapa en la Roja
“Después de muchas semanas, anoche pude dormir, pude reconciliar el sueño y la tranquilidad, porque no era fácil por la situación que se vivía. No es fácil digerir la reacción de los hinchas. Socialmente, hoy todo es agresividad, insultos, en la calle y la vida cotidiana”, complementó Garcés, poniéndo énfasis en la rabia que le venían demostrando los fanáticos en los últimos partidos del “Decano”.
Respecto a la situación deportiva de Wanderers, el experimentado entrenador sostuvo que “el club viene con una frustración desde el año pasado, donde se ganaron cuatro partidos de 30. Hubo cuatro técnicos. Hay una mala fortuna, pero el responsable soy yo”.
“Doy la cara porque estoy en mi casa. Les deseo el máximo de los éxitos, porque sí se puede, el equipo lo ha demostrado”, complementó.
Para finalizar, el DT que fue campeón del fútbol chileno en 2001 con Santiago Wanderers expresó que “me voy con la frente en alto. Lo de Wanderers lo llevo en el corazón y eso no va a cambiar. Seguiré apoyando a los chicos y este fin de semana veré el partido”.