En la victoria del domingo del Barcelona en su visita al Guayaquil City, por el torneo ecuatoriano, ni siquiera la goleada por 4-1 de los “canarios” amainó el enojo de Byron Castillo.
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El lateral, cuestionado por su nacionalidad, recibió gritos de sus rivales. “Colombiano”, le gritaban, y explotó tras uno de los tantos de la amplia victoria y tuvo que ser calmado por sus compañeros.
La situación del jugador se complicó tras la denuncia ante la Fifa que interpuso la Federación de Fútbol de Chile, en la cual solicita los puntos de los dos partidos de las eliminatorias que disputaron la “Roja” y el “Tri”, castigo que pondría a Chile en el Mundial. Y desde Quilín siguen saliendo antecedentes que sustentan la acusación.
“Existe una sentencia judicial emitida por la Corte Provincial de Justicia del Guayas en un Habeas Data iniciado por el jugador contra la Dirección General del Registro Civil del Ecuador”, cuenta Eduardo Carlezzo, abogado brasileño a cargo del caso para Chile.
El Habeas Data al que alude el jurista es una herramienta que no existe en la legislación nacional, pero sí en Ecuador y otros países, y tiene por objetivo que se reconozca la identidad de una persona. Castillo la interpuso porque le habían bloqueado el carnet de identidad, cosa que logró revertir, aunque el Registro Civil ecuatoriano apeló, pero el jugador volvió a ganar.
Así, la entidad volvió a habilitar el documento del futbolista, aunque sólo mientras se resuelve el asunto de fondo, ya que el recurso del Habeas Data no afirma que el protagonista de la denuncia sea, efectivamente, ecuatoriano; se trata sólo de una herramienta para asegurar la protección y el derecho a la identidad de las personas de manera cautelar.
Según Carlezzo, esta situación “de ninguna manera” hablita al deportista a actuar por el combinado del Guayas.
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“Lo que queremos hacer presente, de forma muy clara, es que lo que alega la Federación Ecuatoriana de Fútbol no está declarado en la sentencia. Conforme explicamos, el alcance del Habeas Data es limitado por la Constitución y las leyes de Ecuador, y no existió una apreciación legal acerca de las pruebas relacionadas al fraude en el certificado de nacimiento, pues la propia sentencia dijo que esto debería ocurrir en procedimiento legal oportuno, cuya competencia sería de la justicia penal, ya que la falsificación de documento público está calificada como crimen”, profundiza el abogado.
La jugada de la defensa ecuatoriana, basada en el naipe del Habeas Data, era esperada desde la trinchera local. “En la denuncia que enviamos a la Fifa adjuntamos íntegramente este fallo, pues ya sabíamos de antemano que éste sería el único y exclusivo argumento de defensa por parte del jugador y de la Federación”, dice Carlezzo.
No es todo: Castillo ya tuvo un problema grave con su acta de nacimiento en 2017, cuando integraba la selección sub 20 de su país. En aquella ocasión, tanto él como su compañero John Pereira fueron desafectados del equipo luego de que el Consejo ecuatoriano de Participación Ciudadana y Control Social emitiera un comunicado acusando la adulteración de documentos en el plantel.
Ambos jugadores pertenecían en ese momento al club Norteamérica, que tiene historial en este tipo de problemas.
