Boca Juniors ganó ayer domingo un nuevo título tras vencer a Tigre en la final de la Copa de La Liga Profesional de Argentina. Y más allá de la conquista deportiva en sí misma, una imagen de los festejos del plantel xeneize se robó todas las miradas.
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Específicamente la particular celebración que tuvo en cancha el experimentado defensa Marcos Rojo, quien tras el término del partido se sentó en la cancha del estadio Mario Alberto Kempes junto a su familia, comió pizza, fumó un cigarro y tomó una cerveza en lata.
El registro del mundialista con Argentina en Brasil 2014 y Rusia 2018 rápidamente se hizo viral y generó controversia. Clarín tildó de “polémico” su festejo, mientras que Infobae lo calificó de “poco deportivo”.
Mientras tanto el propio Rojo optó por tomarse la situación con humor. “Sí, lo estaba esperando, tenía que ganar primero”, dijo el exjugador del Manchester United, en una rápida y escueta declaración a TyC Sports.
Más allá de la polémica, Marcos Rojo fue figura en el triunfo 3-0 de Boca Juniors sobre Tigre, al anotar el primer gol de la jornada. Los otros tantos fueron obra de Frank Fabra y Luis Vásquez.
