Bryan Henning y Fabian Holland protagonizaron la jugada más loca del fútbol en los últimos tiempos y posiblemente una de las más raras en toda la historia de este deporte al posarse el uno en los hombros del otro y en cuestión de segundos invertir la situación. Ni los circenses más coordinados lo hubieran hecho tan natural.
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El hecho sucedió en la segunda división de Alemania, en la Bundesliga 2 en el partido por la tercera jornada en el que el Eintracht Braunschweig cayó en su casa 0-1 contra el Darmstadt 98 y se quedó como colero de la categoría.
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Henning y Holland protagonizaron la jugada más loca del fútbol
Cuando se jugaba la hora del partido, una pelota que llegó por aire y fue disputada por ambos jugadores terminó en una acción más propia de la gimnasia o de un circo estilizado que del propio fútbol.
Bryan Henning (Braunschweig) saltó por la pelota, mientras que Fabian Holland (Darmstadt 98) se quedó en el suelo y en el salto su rival terminó sobre sus hombros. Para evitar caerse, terminó haciendo equilibrio entre los hombros y la cabeza del rival.
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En el momento en el que iba a caer, Holland lo sujetó por la cintura para evitar que se golpeara muy duro. Esa sujeción invirtió los roles y al caer, Henning terminó equilibrado y ahora era el jugador de la visita el que estaba sobre sus hombros, aún sujetado de la cintura, pero en esta ocasión para no caerse él.
Una alocada acción que el árbitro debió registrar en primer plano para ver que todo estuviera bien, mientras los jugadores implicados no podían de la risa y cerraron su acto con un fuerte apretón de manos.
