Chile tiene una oportunidad de oro para volver a instalarse en la élite del tenis mundial. Este sábado y domingo recibirá a Kazajistán, en busca de un boleto para la fase de grupos de septiembre de la Copa Davis 2023, donde se definirán los finalistas de noviembre.
PUBLICIDAD
Si bien los tenistas chilenos no llegan en su mejor momento a la serie, están todos sanos, por lo que Nicolás Massú cuenta con contingente completo. Alejandro Tabilo (97º), Cristian Garin (102º), Nicolás Jarry (126º), Tomás Barrios (213º) y Gonzalo Lama (332º) son los elegidos por el capitán, con “Cris” y el “Nico” como probables singlistas para abrir los fuegos mañana.
El ranking no acompaña mucho en este instante a las raquetas nacionales, que al frente tendrán a un equipo kazajo liderado por Alexander Bublik (36º), quien destaca por su regularidad y no sale del Top 50 desde octubre del 2020. El otro jugador que viene encendido es Timofey Skatov, quien llegó a la final del Challenger de Concepción la semana pasada, con victoria sobre Tabilo incluida.
El dobles del combinado asiático también es de temer, con Andrey Golubev (48º en la especialidad) y Aleksandr Nedovyesov (65º) como exponentes. El primero fue finalista de Roland Garros 2021 -junto a Bublik- y 21º del escalafón planetario en mayo del año pasado, mientras que el segundo llegó a dos finales en el 2022 y fue 50º del listado orbital en diciembre.
En teoría, las posiciones y los momentos no favorecen al cuadro criollo. Sin embargo, hay un factor muy importante a considerar: la localía.
Ocho buenas y una mala
El Campus Trentino de La Serena será la sede del enfrentamiento entre chilenos y kazajos. Ahí se ha dispuesto una cancha de arcilla lenta y pesada, con la intención de menguar el juego del equipo visitante, que se hace fuerte sobre pistas duras.
El objetivo es hacerse respetar en casa, algo que ha logrado la escuadra comandada por el “Vampiro” en los últimos tiempos. De hecho, arrastra un invicto de 12 años, con ocho series consecutivas triunfando.
PUBLICIDAD
La última derrota criolla como local fue en el 2011, cuando Italia se impuso por 4-1 en el Court Central del Estadio Nacional. Desde entonces, venció a Paraguay, Perú, México, Venezuela, República Dominicana, Colombia, Ecuador y Eslovenia.
Eso sí, hay un antecedente que juega en contra de la ciudad “papayera”. La única vez que Chile fue anfitrión ahí fue en el 2007, en la recordada y dolorosa caída por 3-2 ante Rusia por el Grupo Mundial, cuando nuestro país asomaba con buenas chances de hacer una presentación destacada en la “Ensaladera de Plata”.
Ahora no será para nada “papaya”, pero la “Roja” del tenis tiene una gran oportunidad de tomarse revancha. El apoyo de los serenases será clave, como han pedido los jugadores y el capitán.
