Deportes

Michael Boys: “Es posible hacer una sólida candidatura, pero se requiere mucho trabajo”

El periodista chileno es el flamante secretario ejecutivo de la corporación Juntos 2030, a cargo de la postulación a la Copa del Mundo.

Mindep
Mindep

En el predio de Ezeiza, donde trabaja habitualmente la selección campeona del mundo y que lleva el nombre de Julio Grondona, la candidatura de Uruguay, junto a Argentina, Paraguay y Chile dio su primer paso formal para que los 4 países sean sede de la Copa del Mundo de fútbol que, en siete años, debería conmemorar el centenario de la primera cita.

PUBLICIDAD

La Corporación sin fines de lucro Juntos 2030 tuvo su primera reunión formal, en la que los cuatro ministros de Deportes de los diferentes estados participantes, más los presidentes de las respectivas federaciones, aprobaron los estatutos de la institución, hicieron sus primeros aportes y se instaló la mesa directiva. También se nombró la plana ejecutiva, que quedó encabezada por Michael Boys, periodista de larga trayectoria trabajando en distintos eventos de Fifa. Además, se designaron los cuatro coordinadores nacionales de la organización que está a cargo de la candidatura. “Luego, si nos adjudicamos la sede, todo queda en manos de una empresa que es un joint venture entre Fifa y los países organizadores”, aclara Boys, secretario ejecutivo de la nueva corporación.

¿Cuáles son las urgencias del trabajo que encabeza?

—Lo primero, curiosamente y aunque parezca divertido, es esperar, porque los requerimientos finales y específicos aún no han sido enviados a las federaciones por Fifa. Aunque postulan los países, la invitación es a las asociaciones miembro socias de la Fifa. A ellos se les invita a postular y, luego, ellos tienen que organizarse con sus respectivos gobiernos. El puntapié inicial es cuando Fifa envía los requerimientos a las federaciones y pregunta quiénes están interesados en postular, gatillando un largo proceso que incluye negociaciones, visitas e inspecciones, no sólo de Fifa sino de múltiples entidades, incluso externas, para evaluar las diferentes candidaturas. Y, desde el lado de la candidatura, se elabora la postulación con la propuesta de valor y compromisos firmados, en este caso de los cuatro estados y sus federaciones. Pese a que digo que tenemos que esperar, ya estamos adelantando tareas que nos permitan que ese momento nos pille trotando y no sentados. Esa es la razón por la que ya tenemos estatutos y elaboramos presupuestos, entre otras cosas, para que -al momento que sepamos los requerimientos- tengamos tareas para repartir en las diferentes mesas de trabajo.

La sede se debería otorgar en el Congreso de Fifa de 2024, en Japón, que aún no tiene fecha. Hay tiempo para armar una postulación sólida?

—En principio, y de acuerdo a la información preliminar -prepandemia, de hecho-, es en la cita de Japón del próximo año cuando se debería elegir la sede de la Copa del Mundo 2030. Es un tiempo acotado, sobre todo porque son cuatro países a los que hay que coordinar, cuatro federaciones y cuatro estados. Eso es lo más complejo en nuestro caso. Hacer la coordinación de mesas de trabajo, la documentación, las firmas que sean necesarias, etcétera, hay que multiplicarlas por cuatro, e implica mucho trabajo. Dicho eso, es posible. Lo que hay que hacer para el momento del cierre de postulaciones y la votación es presentar un compromiso, no tener construidos los estadios, por ejemplo. Todo eso tiene que estar dentro de un plan y un cronograma. Por lo tanto, es posible, pero requiere mucho trabajo.

Pero, en su experiencia, ¿hay tiempo suficiente?

PUBLICIDAD

—Sí, pero hay que trabajar ya. Los requisitos deberían estar pronto y cuanto podamos adelantar, mucho mejor.

¿Cuál es la clave para una postulación seductora? Se compite contra España y Portugal, que quieren sumar el factor sentimental de Ucrania, y contra Marruecos, Egipto y Arabia Saudita, que acaba de llevar a Cristiano Ronaldo como embajador de la candidatura y echa a correr los “petrodólares”...

—La evaluación es multifactorial. Sin dudas, hay un componente financiero. Los planes de desarrollo de Fifa y sus aportes que hace a las federaciones provienen de lo que generan los mundiales. El factor económico es relevante. Luego, hay un componente político que es también muy importante. En eso, el trabajo hecho por la Conmebol, con Uefa y Concacaf, ayuda mucho. Hay un componente histórico insoslayable: son 100 años y, como dijo el presidente de la Conmebol, Alejandro Domínguez, los cumpleaños se celebran en casa y no en la del vecino. El origen de la Copa del Mundo, la efeméride, es en Uruguay. Por lo tanto, eso hay que hacerlo valer. Hay otros elementos de peso, como que en esta confederación está el campeón vigente; en esta postulación también está el primer campeón mundial, lo que tiene gran relevancia. Otra tendencia que es muy interesante, y que se va a notar en el próximo Mundial y en los Juegos Olímpicos, es el compromiso con la sostenibilidad, en el amplio sentido, no sólo medioambiental, en cómo estos megaeventos deportivos significan un paso adelante para los anfitriones y no una carga de problemas.

Votan más de 200 asociaciones nacionales. Ni con toda América se llega a la cantidad de votos que poseen las otras confederaciones. ¿Da para ser optimista?

— La votación es individual, no es por bloques. Otra cosa es que los bloques, principalmente las confederaciones, se pongan de acuerdo respecto de una postulación. Pero si analizas la última votación, no fue lineal: hubo países que se desligaron respecto de sus confederaciones. Cada federación representa un voto y la gestión política que pueden hacer las federaciones con sus pares es muy relevante. Ahí es donde el peso de Alejandro Domínguez, de la Conmebol, y de los presidentes de federaciones, más los presidentes de otras federaciones de la Conmebol que pudieran apoyar esta gestión, será muy importante.

Más de una década de trabajo

Michael Boys también explica cómo surge la idea de la organización de la Copa del Mundo sudamericana para siete años más, así como la génesis de la corporación Juntos 2030 y los objetivos de la misma: “Esto tiene una historia bastante larga. La historia nos volvió a juntar a quienes empezamos a hablar de esto hace más de 10 años, cuando Sebastián Bauzá, actual ministro del Deporte uruguayo, era el presidente de la Asociación Uruguaya de Fútbol. Tenía el sueño de postular para que el Mundial retornara a ese país en 2030, un siglo después de la disputa de la primera cita. Por aquel entonces, haciendo una consultoría a la AUF, elaboramos una serie de planes, entre ellos cómo poder ir allanando el camino, sabiendo ya en ese entonces que era difícil que Uruguay pudiera albergar en solitario una Copa del Mundo nuevamente. Pasó el tiempo, evolucionaron los mundiales, abriéndose a organizaciones de más de una sede, y Sebastián Bauzá hoy es el secretario de Deportes de su país. A lo largo de estos años ha habido una serie de mesas de trabajo, todavía muy políticas y de declaraciones de intenciones, en las que se fueron sumando actores. Primero Argentina, luego fueron a conversar con la Conmebol, con lo que se agregó Paraguay y, en 2019, se le hizo la invitación a Chile para que se uniera a un grupo de trabajo, que esbozaba la posibilidad de postular. Con el tiempo nos fuimos uniendo otras personas, con un trabajo más ejecutivo, y fuimos aterrizando las posibilidades que teníamos de llegar a postular. Así surge la formación de una entidad única que organizara, coordinara y representara los intereses de los cuatro países, y sus respectivos gobiernos y federaciones. Finalmente, se optó por una corporación sin fines de lucro, que es la que se instaló en Buenos Aires, con su primera asamblea de los socios, y se le dio una primera organización a entidad ejecutiva, que está obligada a trabajar y ejecutar los planes de esta corporación o consorcio de países postulantes a la Copa del Mundo”.

PUBLICIDAD

Tags


Lo Último