El jugador brasileño Dani Alves, acusado de agredir sexualmente a una mujer de 23 años en Barcelona, seguirá en prisión provisional después de que el Juzgado de Instrucción número 15 rechazara su petición de libertad después de que tanto la Fiscalía como la acusación particular se opusieron a su salida en libertad, alegando el riesgo de fuga.
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El juzgado consideró que existen indicios de criminalidad, donde se incluye la última versión que explicó, en la que reconoció la penetración consentida, pero que antes no había mencionado por temor a su pareja; Además, el juzgado español destacó que la declaración de la víctima de 23 años ha sido persistente en todo este tiempo, mientras que la del jugador ha sido cambiante y ofreció hasta cuatro versiones.
Las autoridades españolas señalaron el riesgo de fuga del exjugador del Barcelona debido a su doble nacionalidad: española y brasileña, y su posible huida a Brasil, donde no hay convenios de extradición y también destacaron que está ante un “divorcio inminente” de la modelo Joana Sanz por su infidelidad.
Los abogados de Alves pueden presentar de nuevo ante la Audiencia un recurso contra la decisión del juzgado de mantener en prisión al jugador; Sin embargo, los magistrados ya ratificaron la cárcel para el brasileño por los sólidos indicios que lo incriminan en la violación y se resaltó que la investigación está prácticamente acabada, por lo que el juicio podría celebrarse este año.
