Una derrota que dejó más cuentas alegres que decepción fue la que sufrió este martes la selección chilena en su encuentro ante Francia, que si bien se saldó con un 3-2 en favor de los galos en el estadio Vélodrome de Marsella, puso de relieve lo que el técnico Ricardo Gareca espera del Equipo de Todos en los próximos compromisos oficiales de la Roja en la Copa América y las clasificatorias mundialistas.
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Si bien este partido fue solamente el segundo del argentino al mando del seleccionado nacional, dejó en evidencia que la victoria obtenida días atrás frente a Albania (3-0) fue obra de un estilo de juego más frontal y con un espíritu más combativo por parte de la mixtura de futbolistas de la Generación Dorada (Claudio Bravo, Mauricio Isla, Alexis Sánchez y Eduardo Vargas) y los que están llamados a liderar la renovación del cuadro nacional (Gabriel Suazo, Paulo Díaz, Rodrigo Echeverría, Marcelino Núñez y Darío Osorio).
Y eso quedó demostrado desde el minuto inicial, cuando la selección apretó en la salida a una apagada selección gala, que se vio enfrentada a la rejuvenecida dupla Isla-Sánchez por el sector derecho, y al escalonado pressing de Núñez y Echeverría en el centro del campo.
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Como si eso no fuera suficiente, la labor de la defensa nacional estuvo a la altura del laureado rival, con Suazo, Díaz y Lichnovsky muy concentrados en no darle espacios a los desbordes de Mbappé o Teo Hernández.
El buen juego de la selección de Chile
Así las cosas, no llamó la atención que a los cinco minutos la Roja encontrara la apertura del marcador en una impecable triangulación de Isla con Sánchez, que le permitió a Núñez fusilar a Maignan para decretar el 1-0.
Esos fueron los mejores pasajes de Chile, que frecuentemente llegaba al arco rival, y con un Francia que no lograba asentar su juego en el terreno, algo que lograron solucionar pocos minutos después, cuando Fofana aprovechó una jugada personal de Mbappé para sacar un zurdazo desde fuera del área que se le coló en el lejano palo derecho del arco defendido por Bravo.
Efectividad al ciento por ciento en el primer ataque galo, que tras el empate logró desnivelar el juego al punto que un cabezazo de Kolo Muani -que se llevó encima a dos jugadores chilenos en el salto-, sobre los 25 minutos, puso la cuenta 2-1.
Un final con una derrota no tan amarga
El segundo lapso mostró el mejor juego de Francia, que con ataques frontales siempre incomodó a los defensores nacionales. Tanto así, que un desborde por derecha le permitió a Giroud ampliar el marcador a 3-1 sobre los 72 minutos.
Sin embargo, este equipo de Gareca pareciera tener la fórmula para ser competitivo incluso en la adversidad, como con el gol anotado por Osorio, que si bien no impidió la derrota de Chile, dejó en evidencia que el nuevo proceso liderado por el deté argentino promete más de alguna alegría futura para los hinchas de la Roja.
Goles: 5′, Núñez (CHI); 18′, Fofana (FRA); 25′, Kolo Muani (FRA); 72′, Giroud (FRA); 82′, Osorio (CHI).
Estadio: Vélodrome, Marsella.