En medio de la severa crisis económica por la que pasa el fútbol chileno, la ANFP, por la sentencia de parte del Centro de Arbitraje y Mediación de la Cámara de Comercio de Santiago, fue condenada a pagarle la cuantiosa suma de $25.856.250.000 a Warner.
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Todo comenzó con una demanda que presentó Warner en 2021, quien es propietaria de TNT Sports –antes Canal del Fútbol (CDF)–, contra la ANFP por incumplimiento de contrato. En específico, la empresa alegó que durante 2019 y 2020 no se cumplió con la cantidad mínima de partidos pactados en el contrato de televisación. En 2019 fue a raíz del Estallido Social, y en 2020 debido a la pandemia de Covid-19, por lo que exigieron una millonaria compensación por los daños sufridos.
Además de haber sido condenada a pagar más de $25.800 millones, otros $8.100 millones deben ser cancelados por intereses, superando los $34.000 millones. Frente a esto, el ente rector del fútbol chileno buscó anular este fallo, no obstante, este lunes 4 de agosto la Corte de Apelaciones de Santiago rechazó el recurso, confirmando la validez de la sentencia arbitral.
Las posibles soluciones ante esta deuda
Por lo anterior, la ANFP ya busca urgentemente soluciones con el fin de evitar el colapso financiero del ente. Y es que, según estimaciones, para lograr pagar esta cifra, los equipos de Primera División tendrían que resignar cerca de $18 millones mensuales durante ocho años, mientras que los de Primera B deberían pagar la mitad.
Para evitar esto, Jorge Yunge, secretario general de la ANFP, ha liderado las negociaciones con Warner para intentar evitar que se concrete el pago completo, proponiendo alternativas que favorezcan a ambas partes.
Una de las principales salidas: jugar más partidos
Una de las ideas es aumentar los encuentros por temporada, permitiendo generar mayor contenido para TNT Sports y así compensar parcialmente las pérdidas. Esto se podría realizar organizando torneos de verano, o bien, extender el calendario anual.
Aunque también se ha planteado cambiar el formato del Campeonato Nacional y volver a los torneos cortos que incluían los famosos playoffs, que se utilizaron hasta 2012. Además, se sumaría una Supercopa con los campeones de los dos torneos anuales, más los finalistas de la Copa Chile.
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Eso sí, este posible cambio de formato ha generado debate entre los dirigentes, pues algunos argumentan que los torneos cortos benefician a los grandes equipos, que tienen mayores recursos, mientras que otros creen que podrían hacer el campeonato más competitivo.
Por el momento, estas propuestas están siendo evaluadas en diversas reuniones entre los clubes, en busca de una salida alternativa a esta compleja situación.