La preocupación sigue instalada en el fútbol chileno tras la nueva actualización del estado de salud de Nelson Acosta, histórico exdirector técnico de La Roja y figura clave en clubes como Cobreloa, Everton y Unión Española. Durante la semana pasada, ex DT ingresó a la urgencia de la Clínica Isamédica de Rancagua debido a una importante baja en su frecuencia cardíaca, lo que le provocó un marcado malestar.
De acuerdo con la información entregada por el centro asistencial, Acosta fue trasladado de inmediato a la Unidad de Paciente Crítico (UPC), donde permanece internado y bajo estricta observación médica. Según señalaron desde la clínica, el exestratega de 81 años se encuentra “estable dentro de lo delicado”, aprovechando pequeños avances que ha mostrado con el paso de las horas. Aun así, el escenario continúa siendo complejo y requiere monitoreo permanente.
Fuentes consultadas por D13 confirmaron que su evolución es evaluada día a día, enfatizando que la condición del exseleccionador nacional corresponde a un “estado de gravedad controlado”. No obstante, se descartó que pueda ser dado de alta próximamente, a diferencia de ocasiones anteriores en que logró volver a casa tras estabilizarse. Esta vez, su inestabilidad cardíaca no permite un traslado y deberá permanecer internado hasta presentar mejorías más sostenidas.
Un punto relevante es que, pese a la baja frecuencia cardíaca que provocó su ingreso, los médicos no necesitaron utilizar un marcapasos para estabilizarlo. De momento, las decisiones clínicas se irán revisando conforme avance su recuperación, según consignó el citado medio.
Acosta, diagnosticado con Alzheimer en 2017, es recordado como uno de los técnicos más influyentes del fútbol chileno. Bajo su dirección, la selección clasificó al Mundial de Francia 1998 y obtuvo la histórica medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Sídney 2000. A nivel local, sumó importantes logros: fue bicampeón de Copa Chile con Unión Española (1992–1993), levantó dos títulos de Primera División con Cobreloa (Apertura 2003 y Clausura 2004) y consiguió el último campeonato de Everton tras coronarse en el Apertura 2008.