La vida de Ana Frank, el libro de memorias de una joven holandesa en la Segunda Guerra Mundial, y que todos alguna vez leímos en nuestra infancia y adolescencia, llegó a Netflix hace unos en formato de película, cuya trama se basa en las memorias de su amiga Hannah Goslar.
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Dirigida por Ben Sombogaart, la película holandesa se ha posicionado como una de las más vistas en la plataforma en los últimos días, y es que su conmovedora historia atrae una audiencia fiel al género del drama de época.
La película, como se menciona anteriormente, gira en torno a la vida de Goslar, su amistad con Ana que se inicia en Ámsterdam y culmina con los días de horror en un campo de concentración nazi, y la visión de ambas jóvenes sobre un conflicto mundial que sigue doliendo.
De acuerdo a la sinopsis de Netflix, la película está “basada en la amistad entre Ana Frank y Hannah Goslar, desde la ocupación nazi en Ámsterdam hasta su desgarrador encuentro en un campo de concentración”.
La película protagonizada por Josephine Arendsen (Hannah) y Aiko Beemsterboer (Ana) se narra en dos líneas temporales: una que cuenta los días de amistad en Ámsterdam y otra con los días tristes del holocausto en un campo de concentración.
Actualmente, Hannah Goslar tiene 93 años y colaboró para el filme desde Jerusalén, ciudad donde vive.
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