La pareja real compuesta por Meghan Markle y el príncipe Harry habrían tenido problemas con sus vecinos en California, ya que su vivienda emanaría un olor bastante extraño, que molesta a los hogares más cercanos.
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Recordemos que tras apartarse de sus funciones y responsabilidades de la corona durante el 2020, los tortolitos decidieron mudarse a Santa Bárbara, en el estado de California, en Estados Unidos y actualmente su pequeño hogar estaría evaluado en $14.7 millones de dólares.
Sin embargo, aunque se mudaron lejos de las presiones que la realiza británica, siguen teniendo algunos dramas en su nuevo continente sobre todo con los habitantes del exclusivo vecindario de Montecito.
¿El problema? El aire maloliente que proviene desde las aguas estancadas del pantano que funciona como refugio de aves de la propiedad.
Según los consignado por el medio inglés, Daily Mirror, uno de los residentes comentó: “huele a despojos que se han estado pudriendo al sol. Me revuelve el estómago”.
“Los problemas de olores son esporádicos”, lo que lleva a que “muchos propietarios cierren sus ventanas”, comentó uno de los administradores de aguas limpias de la ciudad estadounidense, Cameron Benson al medio The New York Post.
Además, agregó que el Refugio de Aves Andree Clark, que queda bastante cerca de la mansión de la pareja, ha presentado los mismos problemas.
Aunque ningún representante de los duques de Sussex ha respondido a las acusaciones, el mismo medio publicó que una fuente cercana asegura que los malos olores no provienen de la vivienda real.