Una traumática experiencia que vivió en España reveló en Milf la animadora Claudia Conserva.
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En el programa de TV+, señaló que “me acordé de un episodio que viví hace mil años donde me confié demasiado, porque todo fluía, todo resultaba”.
Al respecto, relató sobre un viaje que hizo ella sola a Ibiza en el país hispano.
“Llego allá, arriendo auto, manejar en un país que no conozco con mapa, porque en esa época no había GPS”, expresó.
En ese sentido, indicó que “me confié y dije ‘la vida me está diciendo juegue’. Tenía que llegar a un pueblo: San Juan. Empiezo a buscar el pueblo y lo encuentro. Dije ‘me pasé, soy la mujer más independiente del mundo’”.
La animadora llamó a la persona en donde se iba a quedar, quien le dio las indicaciones para llegar al lugar.
“Me explica y me dice ‘mira sigue adelante y vas a encontrar un camino de tierra a la izquierda y dobla por ahí, sube, sube el cerro y ahí va a estar mi casa”, manifestó.
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Conserva afirmó que en ese momento “me creía plena, afortunada, que todo fluía, la suerte estaba conmigo”.
“Esto no está bien”
Sin embargo, la suerte cambió para la animadora. “Me pasé del camino, seguí de largo y encontré otro camino de tierra”.
“Empiezo a subir la montaña con este auto arrendado y como que llegó un momento en que ya no había huellas, y decía ‘esto no está bien’”.
“A lo lejos veo una casa, me estaciono y dejo el auto atrapado porque no era la casa y tenía que darme la vuelta para bajar el cerro, y no pude dar vuelta el auto porque quedó atrapado entre dos paredes”, reveló.
“Tuve que bajarme así como pude y dejar el auto botado en un cerro en Ibiza, y caminar horas y horas bajando el cerro y llegando de nuevo al pueblo, buscando teléfono público para decirle ‘me perdí y no sé en donde dejé el auto”, expresó.
“Cáchate que terminé en la policía”, relató Conserva, agregando que “me senté en la cuneta a llorar, mi suerte cambió en dos segundos. Y después me subieron a la camioneta policial y yo iba detrás de los barrotes”, dándoles indicaciones.
Tras llegar al lugar donde dejó el vehículo, “estaba la gente agarrándose de la cabeza ‘cómo alguien pudo poner el auto ahí'”.
“Ahí se desencadenó toda la mala suerte. Tuvieron que levantar el auto, no había posibilidad de maniobrar, fue un desastre. Así cambió la suerte”, remató.
