Dueño de un indiscutible talento artístico, personalidad carismática y atractivo físico, Michel Brown está consagrado como uno de los actores más exitosos y queridos en Latinoamérica.
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Sin embargo, antes de alcanzar este reconocimiento por su extraordinario desempeño en producciones como Pasión de gavilanes o Pálpito, Brown fue un aspirante a actor como cualquiera.
Los sueños del nacido en Argentina comenzaron a materializarse a comienzos de los 90 cuando hizo su debut en la televisión como parte del elenco del programa de entretenimiento Jugate conmigo.
A partir de entonces, gracias a la madera actoral y carisma natural que demostró en esta emisión, no pasó mucho para que se ganara la oportunidad de estrenarse como histrión en las telenovelas.
La imagen de Michel Brown cuando debutó en las telenovelas
En 1996, un par de años después de finalizar su participación en Jugate conmigo, Michel debutó en los melodramas con un rol principal en la segunda temporada de la telenovela argentina Chiquititas.
Dentro de la exitosa producción, que seguía las vidas de los habitantes del orfanato Rincón de luz, el incipiente actor de entonces 20 años de edad se destacó dando vida a Tomás Linares Pintos.
En las emocionantes tramas, emitidas por Telefe y producida por Cris Morena, Tommy se incorpora al hogar de huérfanos como profesor de música de los niños y adolescentes que residían en este.
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A lo largo de casi 400 episodios, divididos entre la segunda y tercera entrega del proyecto familiar, la novel estrella mostró sus incuestionables dotes actorales y su galanura en la flor de la juventud.
Asimismo, además de sus habilidades para la actuación, Michel también exhibió en la serie su talento para el canto interpretando dos temas de la banda sonora: Pánico y Pienso en ti.
Tras finalizar su intervención en Chiquititas, en diciembre de 1997, el jovencísimo actor comenzó a expandir su trayectoria artística encadenando papeles sin parar en una producción tras otra.
Las chicas de enfrente, DKDA: Sueños de juventud y Súbete a mi moto son algunas de las novelas en las que actuó hasta que se ganó el rol que marcó su vida: Franco Reyes en Pasión de gavilanes.
Su actuación en el exitosísimo melodrama colombiano lo catapultó a la fama internacional y su carrera despuntó. El resto es una historia repleta de éxitos que se extiende hasta el presente.