El fotógrafo e influencer, Jordi Castell, sacó chispas en redes sociales con su participación en “La Divina Comida” de Chilevisión. El momento polémico fue cuando explicó por qué llamó a su perrita Nina Simone.
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“Fue recogida en unas situaciones atroces. Eran cinco cachorros que nacieron encerrados en una caja de cartón, porque la estúpida de la dueña tuvo la brillante idea de encerrar a la perra madre en una caja toda la época que estuvo preñada”, comenzó el relato de la historia.
Pero cuando señaló que su mascota: “la pobre era fea como la noche oscura. De hecho, por eso, con todo respeto, le puse Nina Simone por negra y fea”.
De inmediato en redes comenzaron a tratar de racista y discriminador a Castell, quien consultado por Publimetro precisó que se referiría al tema sólo en este post:
“Esto no es una aclaración. Es reafirmar la razón principal por la que recogí y rescaté a mi perra: porque era negra, hembra y tenía un grado de desnutrición importante. Cualquier médico veterinario o fundación que rescata animales tienen en sus manos las estadísticas que los perros que nadie quiere adoptar son las hembras negras”, comenzó su escrito en Instagram.
“Por eso que a la mía quise darle el trato de una que esté llena de privilegios.Así como mi perra, negras han sido las mujeres que han regido mi acercamiento a la música desde que tengo uso de razón. Diana Ross, Aretha Franklin, Grace Jones, Donna Summer y por supuesto, Nina Simone. Negros han sido varios de mis inolvidables amantes a lo largo de mi vida y negro es uno de mis amigos más cercanos. Negro es el color que más cómodo me hace sentir y negro es el marido de una gran amiga”, siguió.
Castell insistió en que “entiendo y lamento que hayan personas que se miran al espejo y no les gusta lo que ven, disparan rabia y resentimiento, buscando pretextos para insultar y hasta crear en sus mentes estrechas que soy racista. No sigan creyendo que con un baño de tina en cloro van a blanquearse, porque pierden su tiempo al igual que dándole interpretaciones antojadizas a mis palabras. La raza, la sexualidad y los valores se llevan con orgullo en personas con un coeficiente intelectual óptimo para interactuar. Si quieren poner palabras o tergiversar algo que dije desde el amor hacia mi perra o cualquier animal negro, vayan e interpreten lo que les de la gana. Total, mientras malas versiones de ser humano hablan mal de mí, más me fortalezco”, sentenció.