Kenita Larraín se referirá esta noche, en entrevista con el programa “Juego textual”, a las posibilidades de reconciliación con Iván Zamorano a casi dos décadas del fallido matrimonio que tuvo la pareja.
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En el estelar de Canal 13, cuyo episodio de este martes presentará varios episodios en la vida de la modelo y actual numeróloga, Larraín reconocerá que tiene “toda la disposición” y está “abierta a esa reconciliación” con el retirado futbolista y su esposa, la también modelo María Alberó.
“Me encantaría, sería ideal para mí. Tengo toda la disposición, siempre he estado abierta a esa reconciliación, pero del otro lado no, y eso lo respeto”, explicará Kenita, quien anticipa que pese a su explícito deseo, la decisión final dependerá de Zamorano y su esposa.
Si algún día se da, sería súper sanador para él (Iván Zamorano), que está feliz con su familia, y para mí, que estoy feliz con mi familia.
— Kenita Larraín
“Si yo lo llamara sería un poco invasivo, sé que al menos hasta hace poco no me tenía buena ninguno de los dos, ni él ni su señora. Creo que las cosas se dan en el momento en que tienen que ser, y no quiero forzar nada”, afirmó.
“Si algún día se da, sería súper sanador para él, que está feliz con su familia, y para mí, que estoy feliz con mi familia”, agregó.
El proceso sanador de Kenita Larraín
El proceso de reconciliación que busca la modelo con el exseleccionado nacional se da a meses de haberlo conseguido con su anterior marido, el extenista Marcelo Ríos, con quien logró sanar las heridas de su fallida relación gracias a la intervención de Giuliana Sotela, primera esposa de Ríos, y su hija Constanza, con quienes coincidió en el programa “El discípulo del chef”.
En aquella ocasión, según contó este martes hoyxhoy.cl, Larraín logró reconciliarse con el deportista con quien estuvo casada entre 2005 y 2008, luego de una llamada telefónica que el propio Ríos le hizo a la modelo mientras ella se encontraba en Buenos Aires junto a su actual marido.
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Creo que las cosas se dan en el momento en que tienen que ser, y no quiero forzar nada.
— Kenita Larraín
“Cuando vi la foto en la llamada dije: ‘¡No, éste es Kramer!’. Cuando le contesté me dijo: ‘Gracias por contestarme, qué buena onda’. Fueron demasiados años en que lo vi siempre hablando mal y desde la herida. Ambos apostamos por un matrimonio y una familia y no resultó”, contó en el programa de Canal 13.
“Es muy importante hacer los duelos y cerrar esos ciclos, y eso también beneficia a mi marido, a la relación que tenemos y a la familia que formamos. Yo siento que reconciliarnos nos liberó a ambos”, fnalizó.